Uno de los
productos más valorados y conocidos de Vinaroz (Castellón) es el langostino.
Este langostino
puede tener un tamaño de hasta 20 centímetros, y se caracteriza por su
carnosidad y cuerpo. Es conocido como el langostino más sabroso de la
península. Tanto es así, que el duque de Vendôme no pudo resistirse a sus
encantos culinarios y murió de un atracón.
¿Quién era el
Duque de Vendôme?
El 1 junio de
1654 nació en París Luis José de Borbón,
duque de Vendôme, duque de Beaufort, duque d’Etampes, duque de Mercoeury, conde
de Penthièvre.
Desde muy joven se formó en el arte de la guerra. Conocido como gran general, alcanzó el grado de mariscal de Francia en el reinado de Luis XIV.
Retrato de Luis José de Borbón, duque de Vendôme (Wikipedia)
Fue enviado a
España durante la guerra de Sucesión, donde estuvo al mando de un ejército de
apoyo a los intereses de Felipe V.
Destacó en la batalla
de Brihuega, en diciembre de 1710, derrotando completamente al ejercito del
general británico James Stanhope.
Gracias a la
princesa de los Ursinos, el rey Felipe V
de España le concedió el tratamiento de alteza, rango que solo poseían
algunos miembros de la familia real.
Después de haber sido nombrado virrey de Cataluña y comandante en jefe del ejército español, la muerte le sorprendió en Vinaroz, el 11 de junio de 1712. Según se cuenta en la localidad, murió de un empacho de langostinos. Sus restos descansan en el Escorial.
Hasta la cosa más inocua, en exceso, se convierte en tóxica, y la fulminante gula del duque se encargó de eliminar para siempre su insaciabilidad.
El
22 de enero de 1901 fallecía Victoria I a los 81 años, reina del Reino Unido de
Gran Bretaña e Irlanda y emperatriz de la India, entre otros títulos. Bajo su
reinado, su país fue llevado a lo más alto en cuanto a poder y grandeza, vivió
el esplendor del Imperio. Llevó la corona durante 64 años, el tiempo más longevo
hasta la actual Isabel II, su tataranieta.
No
estaba previsto que llegara a ser reina porque su padre, el duque de Kent, era
el cuarto hijo del rey Jorge III. Éste falleció en 1820, y su primogénito Jorge
IV, le sobrevivió poco tiempo, falleciendo diez años después. El siguiente en
la línea sucesoria era su tío Guillermo IV, de 65 años, también sin
descendencia, por lo que el Parlamento
reconoció el derecho sucesorio a la huérfana del siguiente hermano, ya que el
padre de Victoria había fallecido.
No
estaba preparada ni educada para reinar, pero la maquinaria real se puso en
marcha en la labor. Cumplió 18 años el 24 de mayo de 1837 y, ni un mes después,
el 20 de junio, Guillermo IV murió.
Una
vida marcada por la figura de su marido
Presidió
desde el trono casi dos tercios del siglo XIX. En ese tiempo, España vivía la
Guerra Carlista, revoluciones y pronunciamientos. Vio pasar tres monarcas y una
república, por no hablar de regencias y espadones. Francia, por ejemplo,
conoció dos dinastías regias, entre ellas un imperio y una república.
Su
vida podría dividirse en dos partes. Una, la que vivió junto a su marido, el
príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha, alemán y primo de Victoria. Durante
esta etapa el matrimonio actuaba como un equipo, de hecho, la creciente
influencia política de Alberto sobre la reina planteaba problemas
constitucionales.
Retrato del príncipe Alberto, 1840 (John Partridge)
Y
la segunda parte, con el fallecimiento de Alberto en diciembre de 1861, que
supuso un punto de inflexión en la biografía de la reina. Se recluyó en su
soledad delegando el poder en manos de sus primeros ministros. Su carácter fue depresivo
y su vida una reclusión perpetua, siempre vestida de negro.
Cinco
de sus nietas reinaron media Europa
Su
política diplomática y de matrimonios fue tejiendo una tela de araña en toda
Europa. Con la llegada de sus nietos, la reina se había convertido en jefa y
consejera de un gran grupo de familiares en Inglaterra y Alemania.
Fue madre (Eduardo VII), abuela (Jorge
V) y bisabuela (Eduardo VIII) de reyes de Inglaterra con los que llegó a convivir en algún momento
de sus vidas, como se aprecia en la siguiente fotografía.
Cuatro generaciones: la reina Victoria I, el rey Eduardo VII, el rey Jorge V y Eduardo VIII, duque de Cornwall
Su
primera hija, Victoria, se convertiría más tarde en la esposa de Federico III,
Kaiser de la Alemania Imperial. Reina de Prusia y emperatriz consorte de
Alemania durante los 99 días de reinado de su marido.
Y
cinco de sus nietas fueron reinas: Alejandra, zarina de Rusia; Marie, reina de
Rumania; Victoria Eugenia, de España, que se casó con Alfonso XIII; Maud, hija
de Eduardo VIII y reina de Noruega; y Sofía, reina de Grecia. Sí, su parentesco
llega hasta la corona española, por ambas vías.
Dio nombre a toda una época, la victoriana. El cenit del Imperio impulsado por la revolución industrial, el urbanismo y el colonialismo.
En su reinado se vivieron cambios culturales, políticos, económicos, industriales y científicos de relevancia. Y precisamente ese colonialismo no brindó épocas de paz duradera, viviendo, por ejemplo, la Guerra de los Boers en Sudáfrica o la Rebelión de la India.
La reina Victoria con su pequeña corona de diamantes, 1882 (Fotografía de Alexander Bassano).
A
nivel económico y social, tuvo sus luces y sombras. Pero lo que sí ha pasado a
la historia de este periodo fue su excesivo moralismo y puritanismo. En su
época triunfaron Charles Dickens, Lewis Carrol, Oscar Wilde o Arthur Conan
Doyle.
Al
finalizar su reinado, el Reino Unido iba perdiendo fuerza en el orbe mundial y
otras potencias emergentes ganaban espacio y peso, como EE. UU. y Alemania.
El cabo de Santa María se encuentra localizado en aguas del océano Atlántico. Es el punto más meridional del Portugal continental, en la ría Formosa, municipio de Faro.
Antecedentes
Tras algunos éxitos obtenidos, como en la fracasada tentativa francesa de saltar el Canal de la Mancha, la moral española estaba muy reforzada.
Mientras tanto, la escuadra inglesa, que se encontraba a la defensiva, permanecía en sus aguas. La Winchcomb, de 26 cañones, había sido apresada por don Juan de Lángara, pasando a prestar servicio en la Armada. Otras divisiones también consiguieron apresar varios buques enemigos, en los que destacó don Federico Gravina.
Retrato anónimo de Juan de Lángara (Museo Naval de Madrid).
Toda la atención se centró en Gibraltar, aunque el gobierno español consideró que la plaza era inexpugnable con los medios disponibles y desistió del asedio. A pesar de ello, en el Campo de Gibraltar colocaron a un ejército de 13.000 hombres, al mando de don Martín Álvarez de Sotomayory se encomendó el bloqueo por mar a don Antonio Barceló, jefe de la escuadra.
Gobernaba la plaza el general Elliot, con unos 5.000
hombres, y la división del almirante Duff. El bloqueo de Barceló era bastante
eficaz, e Inglaterra preparó una flota, con Rodney al mando, con el objetivo de
llevar provisiones y refuerzos a Gibraltar.
Enterados los españoles, unieron los navíos que
habían quedado en Brest a otros franceses para abortar la salida de Rodney. En
Cádiz estaba don Luis de Córdova, por si el plan fracasaba. Pero todo se vendría
al traste de manera sorprendente…
Inicio de la campaña
El 27 de diciembre de 1779, zarpó Rodney con 22
navíos y 19 fragatas escoltando a un convoy de 200 mercantes. En Brest tenían
conocimiento de la salida, pero, una vez más, los franceses no cumplieron con
su parte y, una vez se hicieron a la mar, ya era demasiado tarde.
Córdova estaba esperando a Lángara en el Estrecho, pero surgió un contratiempo que provocó su retirada a Cádiz: un fuerte temporal, que estuvo a punto de hundir al Santísima Trinidad.
Oleo del Navío Santísima Trinidad.
Rodney, tras apresar 15 mercantes españoles, dobló el cabo San Vicente el 12 de enero y, a la altura del cabo Santa María, divisaron la escuadra de Lángara, que ordenó formar en línea de combate, más al comprobar que las fuerzas de Rodney eran superiores, consultó con sus comandantes, decidiendo retirarse a todo trapo hacia Cádiz.
Rodney, aprovechando la velocidad que le aportaban
sus forros de cobre, ordenó caza general. El Santo Domingo, planto cara valientemente a pesar de estar rodeado
por enemigos, pero muy pronto fue volado y hundido.
Aquello amedrentó a los españoles, que fueron apresados
uno a uno. El insignia Fénix fue
atacado por dos enemigos, a los que se unieron tres más, perdiendo el palo de
mesana y el mastelero mayor. Lángara fue
herido, entre otros muchos, lo que propició su rendición.
Balance final
Se habían perdido siete navíos y la tempestad creaba
dificultades a las tripulaciones de presa inglesas en los capturados San Julián y San Eugenio, por lo que pidieron ayuda a los españoles, los cuales
les comunicaron que estaban dispuestos a ayudar, siempre y cuando se dirigieran
a Cádiz.
Los ingleses cedieron, por lo que las perdidas fueron el Santo Domingo, volado, y los Fénix, Princesa, Diligente y Monarca, apresados.
Retrato del almirante Lord George Rodney (Jean Laurent Mosnier, 1791)
La escuadra de Rodney y los barcos españoles
apresados entraron en Gibraltar, zarpando el 13 de febrero, mientras las
escuadras de Córdova y Gastón hacían reparaciones en Cádiz, dirigiéndose a
América.
Lo más polémico fue que Carlos III, al enterarse del resultado del combate, ascendió a teniente general a Lángara. Una cosa era no castigar al desgraciado jefe y otra muy distinta ascenderlo pese al desastre. Sin embargo, los ingleses quitaron el mando a dos de los comandantes que menos se habían esforzado en la lucha.
Tras conocer las historias de Favila
y don
Pelayo, hoy conoceremos la biografía de Silo, rey de Asturias, y su esposa
ADOSINDA.
Silo de Asturias
Parecer ser que era hijo de una noble musulmana, pero desconocemos quién era su padre. Lo que si sabemos es que era noble, puesto que casó, entre el año 768 y el 774, con la hija de Alfonso I, Adosinda, cuyo hermano era Fruela I.
Es considerado un destacado noble de la corte de su cuñado y, posiblemente, participó en el asesinato de éste. Tras su matrimonio, fue asociado al trono, en detrimento del sobrino de Adosinda, Alfonso II el Casto, que se vió obligado a abandonar la corte.
Retrato idealizado del rey Silo y su esposa Adosinda.
Ocupó el poder en el año 774, apoyado por la nobleza asturiana. Continuó
la política de su antecesor de mantener la paz con los musulmanes, aunque las
negociaciones con Abderramán I debieron ser más distendidas quizás por ser su
madre musulmana.
Su reinado coincidió con la intervención de Carlomagno en España en 778, cuando, al no poder mantener el asedio a Zaragoza, se tuvo que retirar por Roncesvalles, donde sufrió una gran derrota y la subsiguiente campaña de Abderramán I en 781 al valle del Ebro en venganza contra los que habían propiciado la invasión franca.
Al poco de ser coronado, en el 779, tuvo que afrontar una sublevación de
algunos nobles gallegos que apoyaban a Alfonso. La sublevación fue controlada
rápidamente en el monte Cuperio o Cebrero.
Ante la imposibilidad de tener descendencia, Adosinda convenció a Silo
para que asociara el trono a su sobrino y evitar así nuevos enfrentamientos,
instalando a su vez, por el mismo motivo, la corte en Pravia, concretamente en
Santianes.
Durante su reinado se construyó el monasterio de San Juan Evangelista en
Pravia, donde se depositaron los restos de Santa Eulalia u Olalla, recogidos en
Mérida por el propio monarca.
Iglesia San Juan Evangelista, Pravia.
En el año 776, Beato de Liébana, consejero de la reina, concluyó su Traductus de Apocalypsi, de gran interés material e histórico. De su reinado, se conserva un importante documento diplomático del reino astur, que es el más antiguo hasta la fecha, conocido comoDiploma del rey Silo, escrito en cursiva visigoda y fechado el 23 de agosto del 775.
En este documento el monarca hacía donación a unos clérigos de Lucis, lugar
situado entre los ríos Sube y Marsona y entre el riachuelo Alesancia y el lugar
de Mera, en la actual provincia de Lugo, para que edificaran un monasterio.
Silo murió en el año 783, al parecer por causas naturales. Su muerte abrió un periodo
de crisis en la monarquía, ya que, tras
la proclamación de Alfonso II, Mauregato, hijo natural de Alfonso I, usurpó el
poder.
Después de su defunción, el cadáver del rey Silo recibió sepultura en la
iglesia de San Juan de Santianes de Pravia.
Durante su reinado, en la Península solamente acompañaba a Silo Abderramán
I, como emir de Córdoba.
La reina Adosinda
Al parecer era nieta, por parte de madre, de don Pelayo y de su esposa
Gaudiosa, mientras que, por parte de padre, era nieta del duque Pedro de
Cantabria. Su madre fue Ermesinda y su padre Alfonso I el Católico, rey de
Asturias. Se desconoce la fecha de su nacimiento.
Adosinda de Asturias, por Alonso de Cartagena. Retrato que aparece en el manuscrito ‘Genealogía libre de los reyes de España’ (Biblioteca Nacional de España)
Se había casado con Silo y, cosa extraña en la época, lo hicieron por amor. Al morir Aurelio, hermano de Alfonso I, le hubiera correspondido el trono a Adosinda, pero la monarquía asturiana no era hereditaria en esa época, ya que los reyes lo eran por aclamación, y el Consejo eligió a su marido Silo.
Silo y Adosinda eran primos. El matrimonio no tuvo hijos varones y, al morir Silo, su hermanastro Mauregato obliga a Adosinda a ingresar, el 26 de noviembre de 785, en el convento de San Juan de Santianes de Pravia, donde residió, hasta su muerte, junto a su hija María y sus damas.
En la iglesia de San Juan de Santianes de Pravia se conserva la tumba en la que, se supone, yacen los restos del rey Silo y los de su esposa, la reina Adosinda, que fue inhumada en el mismo templo.
Tumba de Silo y Adosinda (Iglesia San Juan de Santianes de Pravia)
No todos
los personajes históricos son recordados por sus obras o por sus hazañas.
Algunos de ellos, a pesar su magnífico legado, son recordados por morir de una
forma absurda. Este es el caso de las siguientes personalidades.
1. Isadora
Duncan
Isidora Duncan fue una brillante bailarina estadounidense con una corta pero intensa fama. Además de por moverse como los ángeles, pasó a la historia por haber sufrido una muerte muy poco común.
La bufanda que llevaba enrollada al cuello se enredó en una de las ruedas de su coche cuando se disponía a subir a él. Éste arrancó tirando de la prenda y estrangulándola hasta la muerte.
Retrato coloreado de Isadora Duncan
2. Arquímedes
El famoso científico de la Grecia Antigua tuvo una muerte nada acorde con su vida. Un soldado le atravesó con su espada en una reyerta.
Pintura «Arquímides» (Jusepe de Ribera, 1630)
3. Tycho
Brahe
Aguantar las ganas de orinar puede ser más peligroso de lo que parece. El conocido astrónomo del siglo XVI, Tycho Brahe, murió por no orinar tras beber en exceso durante una cena.
Pintura «Tycho Brahe» (Eduard Ender)
4. Arnold
Bennett
En el año 1931, en París, se creía que el agua estaba contaminada por tifus. Bennet decidió beber esa agua para demostrar que el pueblo era inculto. Murió a causa del tifus pasados unos días.
Arnold Bennett
5. Esquilo
A él le debemos la famosa tragedia griega, pero la vida no iba a recompensarle como se merecía. Un fatídico día recibió un duro golpe en la cabeza que acabó con su vida. El impacto fue provocado por una tortuga que se había librado en el aire de las garras de un águila.
Escultura de Esquilo (Wikipedia)
6. Maximiliano
de Austria
Maximiliano de Austria, emperador del Sacro Imperio Germánico Romano, murió debido a una fuerte indigestión causada por una ingesta desmesurada de melones.
Pintura de Maximiliano de Austria
7. Antoni
Gaudí
Gaudí, uno de los arquitectos más creativos de todos los tiempos, falleció arrollado por un tranvía en Barcelona. Tras el choque, nadie le ayudo porque no lo reconocieron y quedó tendido en el suelo sin ninguna atención.
Antonio Gaudí
8. Enrique
I de Castilla
Enrique I de Castilla nunca llegó a la edad adulta. El motivo fue una pedrada que recibió jugando con sus amigos cuando solo tenía 13 años de edad.
Pintura de Enrique I de Castilla
9. Albert
Camus
El Nobel de Literatura de 1957 atrajo a la muerte con sus palabras. Cuando la prensa informó sobre la muerte del ciclista Fausto Coppi, en un accidente en carretera, el escritor dijo que no conocía una forma más idiota de perder la vida. A los pocos días, Camus falleció de la misma manera.
Albert Camus
10. Alejandro
I de Grecia
Tuvo un reinado muy poco fructífero y un final ocasionado por su propia mascota. Su mono le mordió contagiándole la rabia y provocándole una infección que terminó matándole.
Retrato de Alejandro I de Grecia
11. Papa
Adriano IV
Una mosca de gran tamaño se introdujo en la boca del Papa mientras paseaba, alojándose en su garganta y asfixiándolo hasta la muerte. Por más que lo intentaron, no pudieron hacer nada por él en el momento del infortunio.
Pintura «Adriano IV» (Jan Van Scorel)
12. Jean
Baptiste Lully
El compositor franco-italiano usaba una pesada batuta para marcar el compás de la partitura a su orquesta cuando ésta le cayó en el pie provocándole heridas aparentemente leves. Un mal seguimiento de las lesiones provocó la aparición de gangrena, la cual le causó la muerte.
Alrededor
del mundo hay miles de fundaciones que cumplen con esta loable labor, pero
también están los santuarios de animales, que se encargan de la misma tarea,
pero con algunas diferencias que te desvelamos a continuación.
¿Hay
santuarios de animales en España? ¿Qué tipo de animales rescatan? ¿Cómo puedo
ayudar? Estas son tan solo algunas de las preguntas que se hacen quienes oyen
hablar sobre estos lugares. Continúa leyendo para saber qué es un santuario, cómo funciona, cómo colaborar e incluso cómo crear
uno propio…
En
todo el planeta hay millones de animales que sufren todo tipo de agravios y no
todos consiguen ser rescatados, pero algunos tienen la suerte de conocer a
personas que les ofrecen una segunda oportunidad y una nueva vida en estos
pacíficos santuarios de animales.
Qué son los santuarios de animales
Un santuario es una instalación donde los animales pueden vivir en libertad y sin miedo. Generalmente se trata de animales de granja (vacas, toros, caballos, chivos, ovejas, gallinas, cerdos, primates…) que han sido vejados o explotados por las industrias de la carne, huevos y leche. Aunque la mayoría recibe a cualquier especie.
Chimpancé abrazando a una cría de tigre blanco
Cuentan
con enormes terrenos donde los animales pueden desplazarse tranquilamente,
rodeados de bosques, ríos o montañas. A diferencia de una fundación, un
santuario de animales no solo se encarga de rescatarlos y recuperarlos, sino
que les brindan un hogar permanente,
donde son protegidos y amados hasta su muerte natural.
Toda
criatura abandonada tiene cabida en un santuario animal. De hecho, hay una
extensa lista de animales de granja que usualmente se pueden encontrar en esos
lugares.
No
obstante, hay algunos que solo se especializan en equinos, otros en animales de
compañía, aves de granja. Incluso existen santuarios de animales especiales
(aquellos con discapacidades físicas por nacimiento a causa de enfermedades o
maltrato).
En
resumidas palabras, es como una fundación, solo que no dan en adopción a los animales que rescatan.
Cuál es la misión de los santuarios de animales
Casi todos los santuarios de animales en España y el resto de países del mundo cuentan con su página web y redes sociales donde comparten su historia y la de sus «habitantes».
Laura Luengo, fundadora del santuario Wings of Heart, con un cerdito. (Foto: Wings of Hearts)
Todos
ellos coinciden en que su misión principal es salvar, rehabilitar yproporcionar
una vida digna a los animales que no tienen cabida en otros refugios. Es
decir, convertirse en un lugar seguro para aquellas criaturas que sufrieron o
fueron dejadas de lado.
Además,
se esfuerzan por promover el respeto, la
compasión y la igualdad hacia todo ser vivo, sin importar su especie y
también promocionan el veganismo como una forma de alimentación saludable y sin
sufrimiento.
Entre
sus campañas está la de orientar a las personas a hacerse conscientes de su
deber ético, lo que significa comprender que nuestras acciones no deben dañar a
ninguna especie.
29 santuarios de animales en España
En España está creciendo el número de santuarios de animales. Ya existen 29, a los que cada vez se suman más voluntarios y colaboradores dispuestos a ayudar, lo que despierta la empatía de las familias, especialmente de los niños.
A
continuación detallamos el mapa de santuarios en España:
1. Santuario Winston
Es uno de los santuarios de animales especializado en ayudar a caballos maltratados y/o abandonados. Se fundó en 2012 como asociación y en 2016 se convirtieron oficialmente en un santuario.
Spirit, uno de los caballos del santuario Winston. (Foto: Santuario Winston)
Ubicado en La Cañada, provincia de Ávila, su historia comenzó cuando rescataron a Winston. Pero después de su muerte, sus rescatadores decidieron socorrer a otros caballos.
Este refugio de animales en Santiago de Compostela
acoge a animales de diferentes especies con historias de maltrato, explotación
y abandono desde 2013.
Inés Trillo, fundadora del santuario Vacaloura, con uno de sus caballos. (Foto: Santuario Vacaloura)
El Santuario Vacaloura promueve el antiespecismo y el veganismo.
Este santuario de animales en Barcelona acoge principalmente a caballos y burros, pero también acepta otras especies y les ofrece una segunda oportunidad.
Leonor Díaz de Liaño, fundadora de ADE, con dos de sus caballos. (Foto: Asociación Defensa Équidos)
Situado en la población de Follonosa, fue fundado por Leonor Díaz en 2001 que, desde los 14 años, comenzó su historia de amor por los caballos.
En la ciudad de Girona, exactamente en el municipio
Camprodón, se encuentra el santuario Gaia.
Coque Fernández e Ismael López, fundadores del Santuario Gaia, con algunos de sus animales. (Foto: Santuario Gaia)
Se encargan de rescatar y recuperar a animales que han sido víctimas de la explotación ganadera y los llevan a un enorme campo de 23 hectáreas en los Pirineos.
Definido como un “hogar antiespecista”, es un pequeño
santuario animal de la provincia de Tarragona que acoge perros, ovejas,
gallinas y especies de granja.
Dos cerdos del santuario El Paraíso de Nora. (Foto: El Paraíso de Nora)
Sus terrenos no son tan amplios, pero se califica como un lugar «donde cada vida importa y los animales tienen oportunidad de soñar».
Protectora y santuario de animales ubicada en el Camino del Zarzoso, Medina del Campo, (Valladolid). También cuenta con refugios en Valladolid capital, Zamora y Palencia.
Se trata de una vivienda en una población de La Rioja, con un pequeño jardín de 70 metros cuadrados, dónde habitan actualmente 18 animales y tres personas.
Refugio que da cobijo a los animales víctimas de la explotación. Se encuentra ubicado en Valencia.
Web: No disponible
Email: No disponible
Localización:
29. Rainfer, Madrid
Es un centro de rehabilitación y descanso dedicado a primates que han sido maltratados utilizados como mascotas, en la industria publicitaria, en circos….
Están en Madrid, pero no hacen pública su dirección exacta por motivos de seguridad hacia los primates y para proporcionarles un ambiente lo más tranquilo posible
El Hogar de Luci, el primer santuario de animales en España
Existen animales únicos en España, así como en todo el
mundo. Y eso es lo que precisamente define a los santuarios de animales, pues
todas las criaturas que rescatan tienen historias y capacidades únicas y
merecen una nueva oportunidad.
Así lo entiende Elena Tova, fundadora del primer santuario de animales en España.
Elena Tova, fundadora de «El Hogar de Luci» (primer santuario de animales en España)
Esta mujer, responsable de más de 200 animales, fundó
“El Hogar de Luci” en 2004, que fue el primer santuario de animales
multiespecie de España. Según ella misma, ya había rescatado cientos de perros
y gatos, pero Benito, un cerdo al que encontró herido, cambió su vida.
Tardó años en encontrar financiación para los terrenos
que necesitaba para rescatar animales de todas las especies. Una fundación
suiza le ayudó a lograr ese objetivo en 2014 cambiando el nombre de la ONG a
“El Hogar ProVegan”.
Hoy en día ha cesado su colaboración con ProVegan,
cambiando de nuevo el nombre a “El Hogar Animal Sanctuary”. Recientemente han
encontrado una nueva localización en Tarragona.
Cómo crear un santuario de animales
El
Santuario Animal Corazón Verde, experto en el tema, detalla en su web cómo
crear santuarios de animales.
Lo primero que recomiendan a las personas con estos planes, es que se lo piensen muy bien: según la ONG, los santuarios de animales no son una inversión de tiempo, sino » la inversión de toda tu vida». Un animal en un santuario dependerá completamente de su cuidador, quien debe proveerle una buena alimentación y atención veterinaria.
Josetxo Sagarra y Pepa Tenorio, fundadores del santuario Animal Corazón Verde, en el campo con varios de sus animales. (Foto: Santuario Animal Corazón Verde)
El
segundo paso es encontrar el terreno adecuado, teniendo en cuenta la cantidad y
tipo de animales que se deseen rescatar. ¿Se va a comprar o a alquilar? ¿Cómo
se alimentará a los animales? ¿Se tienen veterinarios de apoyo? Son algunos de
los interrogantes que hay que plantearse.
Los permisos del ayuntamiento son
importantísimos. Hay que solicitar permiso para un corral doméstico (actividades
inocuas) y luego dirigirse a Ganadería para conseguir el alta como explotación
ganadera, en el caso de que el plan sea rescatar animales de granja. Para los
perros y gatos hay que tener el “núcleo zoológico”.
Una
vez obtenidos los permisos, se pueden comenzar a introducir los animales. Cada
uno debe estar debidamente identificado (con crotal o chip) y tener seguimiento
de los veterinarios.
Saber
cuáles son los lugares para encontrar forraje y paja para los animales es
esencial, así como tener sitios donde
comprar frutas y verduras para su alimentación.
Constituir
el santuario como asociación es recomendable. Y, finalmente, conseguir
voluntarios y padrinos que puedan ayudar.
Cómo colaborar con los santuarios de animales
Los diferentes santuarios de animales, generalmente, tienen en sus webs información sobre las diferentes maneras de recibir donaciones. El dinero recaudado se invierte en alimentación, cuidados médicos de los animales, ampliación de terrenos o en apadrinar a uno o varios de los habitantes del santuario.
Ismael López, fundador del Santuario Gaia, acariciando a una vaca (Foto: Santuario Gaia)
Si
no se dispone de dinero, se puede donar cualquier cosa que puedan necesitar:
artículos de limpieza, mantas, paños, camas y complementos de animales que ya
no se usen… Siempre es conveniente contactar con el centro para preguntar qué
es lo que más les hace falta.
Otra
forma de colaborar es ofrecerse como voluntario. Un santuario siempre necesita muchas manos extra para alimentar
a los animales, bañarlos y cuidarlos. Comunicarse con ellos y ponerse su
disposición, así como participar en los eventos que organizan siempre será bienvenido
por parte del equipo del santuario.
Los expertos aseguran
que es natural sentir aversión ante una situación extraña o de riesgo (ya sea
real o imaginaria). Esa emoción la conocemos como miedo y, de hecho, tiene un
objetivo primordial: la supervivencia. ¿Pero qué pasa cuando el temor es desproporcionado?
En ese caso hablamos de un trastorno psicológico llamado fobia.
Historias de terror para no dormir: 41 historias de miedo aterradoras que no podrás quitarte de la cabeza
Este término deriva de la palabra griega fobos o phobos, que se traduce como miedo. Tal y como cuenta el escritor español Luis Celaá Morales, en su obra titulada Phobos, en la mitología griega este dios (hijo de Ares y de Afrodita) representaba el temor de los soldados antes de emprender la lucha.
Más allá de las ficticias implicaciones mitológicas, los expertos todavía no han podido identificar todas las causas posibles de las numerosas fobias que existen (más de 500). No obstante, se pueden mencionar algunos detonantes:
Las experiencias negativas.
La genética y medio ambiente.
Los cambios en la actividad cerebral.
Es importante no confundir los miedos y fobias. El miedo es una emoción intrínseca del ser humano, mientras que una fobia es un trastorno psicológico que requiere atención médica para que la persona tenga mejor calidad de vida.
La Sociedad Española de Psiquiatría destaca que al menos 6% de la población sufrirá una fobia a lo largo de su vida. Normalmente aparecen en edades tempranas o en la adolescencia, aunque, de acuerdo a una investigación de la Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca (Colombia), algunos trastornos tienen una edad media de manifestación y atienden a otros factores como el género y la región.
Pero cada cabeza es
un mundo, y las cosas que le horrorizan también. La variabilidad complica la
tarea de trazar una clasificación exacta de los tipos de fobias que se conocen;
sin embargo, es posible catalogarlas de la siguiente manera:
Fobias simples o específicas.
Fobias complejas.
Fobias sociales.
La Clínica Mayo señala que, sin importar qué clase de fobia padezca un individuo, generalmente se experimentan determinadas reacciones físicas y psicológicas ante el temor intenso:
Ansiedad o pánico excesivo cuando se está expuesto o simplemente se piensa en el motivo de ese miedo irracional.
Además, tienen consecuencias negativas, que van desde la baja autoestima hasta la afectación de las relaciones sociales e incluso el aislamiento. En casos más severos, una fobia no tratada podría llevar a una persona a abusar de las drogas o el alcohol.
Mujer solitaria caminando por una carretera (Pixabay)
La atención médica es fundamental. Hay
diferentes tratamientos, como la terapia de exposición (que consiste en acercar
poco a poco a la persona a lo que provoca su miedo), terapia del comportamiento
cognoscitiva (CBT), desensibilización, psicoterapia, medicación, entre otros.
El proceso depende en gran medida del paciente y el tipo de fobia.
En internet podemos encontrar cualquier listado de fobias comunes, pero hay
muchas fobias raras que escapan de
toda lógica y raciocinio. A continuación, te contamos cuáles son las fobias más raras y graciosas que probablemente
ni siquiera te imaginabas que existían, qué las causa, cuáles son sus síntomas,
cómo enfrentarlas y más datos curiosos.
Las personas suelen
están familiarizadas con algunas fobias, como la claustrofobia (que afecta a
más de 300 millones de individuos en todo el mundo) o aracnofobia, porque son relativamente
frecuentes. Pero, entre gustos y colores, hay
temores que definitivamente resaltan más que otros y que, sin lugar a dudas,
ocupan un puesto entre las fobias más raras del mundo.
1. Xantofobia: miedo al amarillo
La xantofobia es uno de los tipos de cromofobia (miedo a los colores). Se trata específicamente del temor al color amarillo, y está incluida en la lista de fobias más peculiares.
Mujer caminando delante de pared amarilla (Pixabay)
Proviene de la palabra griega xanthous, que significa amarillo, y de phobos, que se traduce como miedo. Las personas que manifiestan
fobia al color amarillo llegan a experimentar verdaderos cuadros de ansiedad al
mirar ropa, objetos o animales de ese tono. En circunstancias más severas, incluso
se inquietan con tan solo oír la palabra.
Como ocurre con otras fobias, quienes la sufren sienten
náuseas, ritmo cardiaco acelerado, respiración anormal, boca seca, mareos y escalofríos
ante la exposición. Entre las particularidades de los pacientes con xantofobia predominan:
No ingieren ningún alimento
amarillo (yemas de huevo, mostaza, queso amarillo…).
Cierran los ojos y aguantan
la respiración al orinar.
Sienten repulsión ante los
taxis y buses escolares.
Pueden desarrollar sinofobia
(repulsión a los chinos) ya que estos se consideran como la «raza
amarilla».
Repelen las guías
telefónicas.
No usan prendas de oro.
Las causas de este trastorno suelen estar
asociadas a posibles experiencias traumáticas del pasado. Pero también es probable,
aunque en menor medida, que esté estrechamente ligado a motivos culturales,
pues se cree que el color amarillo trae enfermedades, mala suerte y la muerte.
Esa superstición se remonta al siglo XVII, cuando el dramaturgo y actor francés Jean-Baptiste Poquelin, más conocido como Molière, protagonizó en 1673 el ballet-comedia El enfermo imaginario. El pobre hombre murió a los pocos días del estreno, y durante la representación llevaba un vestuario amarillo.
Existen varios métodos para ayudar a un paciente a sobrellevar la xantofobia, como la terapia de exposición o desensibilización sistemática, así como técnicas de distracción, descatastrofización y hasta hipnoterapia. En caso de que el desorden llegue a niveles muy serios, se recetarán algunos fármacos.
2. Turofobia: miedo al queso
La turofobia probablemente es de las fobias más raras vinculadas a los alimentos. Básicamente el individuo experimenta un malestar intenso al estar cerca de cualquier clase de queso y hasta se incomoda si mencionan la palabra.
Varios tipos de queso expuestos sobre una mesa (Pixabay)
Como la mayoría de los miedos irracionales, la fobia
al queso tiene dos causas frecuentes: el condicionamiento (una experiencia
traumática que convierte un objeto, olor o situación en un estímulo
condicionado que produce angustia) o el trastorno de ansiedad.
Generalmente es sencillo evitar el detonante de
esta fobia en casa, pero se complica en reuniones y ciertos lugares. Puede
afectar las relaciones sociales, porque hasta el olor a queso es capaz de
desatar una crisis en quien la sufre.
Los síntomas varían
de acuerdo a cada paciente. Los más comunes son náuseas, mareos, palpitaciones,
realidad distorsionada y ataque de pánico.
En estos casos lo
más recomendable es acudir a un psicólogo para iniciar una terapia cognitivo conductual,
para modificar el comportamiento y pensamientos negativos.
3. Tanofobia: miedo al sol
Se define en pocas palabras como la fobia al sol, más específicamente a los efectos negativos que puede tener sobre la salud. Las personas con tanofobia o heliofobia tienen un miedo irracional de exponerse a los rayos UV.
Niña mirando de frente al sol (Pixabay)
Por lo tanto, los
días soleados son una pesadilla para los tanofóbicos, que sienten los clásicos
síntomas de ansiedad (sudoración, sequedad de boca, mareos, dolor de cabeza…)
si su piel entra en contacto directo con cualquier dejo de luz solar.
Usan medidas de
precaución extremas cuando se ven obligados a salir a la calle durante el día:
chaquetas, guantes, gorros, gafas de sol, protector solar y paraguas. Es lo
opuesto a la tanorexia, que es la obsesión desmedida por el bronceado.
El temor a sufrir un
cáncer de piel, melanoma o quemaduras son las causantes de esta fobia. No
obstante, alejar el cuerpo completamente de los rayos del sol lo priva de la
vitamina D, necesaria para mantener los huesos fuertes.
Cuando el sol se
convierte en una importante influencia negativa y de aislamiento, es necesario
acudir a un especialista. Esta fobia se trata por medio de psicoterapias
específicas, para disminuir la ansiedad del paciente a ser quemado por los
rayos ultravioletas. La idea es ir exponiéndolo poco a poco a tomar unos minutos
de sol al día.
4. Aliumfobia: miedo al ajo
Las leyendas atribuyen el miedo al ajo a criaturas míticas como los vampiros, pero es una fobia muy real que hace que las personas no toleren comer, oler ni mirar el ajo. Es otra de las fobias alimenticias más excéntricas que existen.
Cabezas de ajos adornadas con granos de pimienta (Pixabay)
El nombre de esta
fobia proviene de una adaptación al español del neologismo inglés alliumphobia, que a su vez se origina
del latín allium, que significa ajo.
Este miedo
injustificado puede extenderse a otras plantas como las cebollas, cebolletas,
chalotes y puerros.
Las causas, como
pasa con todas las fobias específicas, varían de acuerdo al paciente. Pero es
común que la raíz se encuentre en el pasado de la persona, en algún trauma
emocional en el que los ajos estuvieron relacionados de cierta forma (directa o
indirectamente).
Los síntomas son
exactamente los mismos que padece cualquiera que esté expuesto a un profundo
miedo, que van desde sudoración, dificultad para respirar, mareos, náuseas, hasta
pérdida de control.
Hablar abiertamente
sobre el problema y una terapia de desensibilización (aproximación progresiva
al motivo del miedo) es el tratamiento a seguir.
5. Hipopotomonstrosesquipedaliofobia: miedo a las palabras largas
Irónicamente la hipopotomonstrosesquipedaliofobia es el miedo a las palabras largas, en concreto a tener que pronunciarlas durante un discurso o conversación.
Mujer asustada leyendo un libro (Shutterstock)
Proviene de la unión
de varias palabras griegas: hipopoto
(grande), monstro (monstruoso) sesquipedali (palabra grande) y phobos (miedo). Esta fobia a palabras
largas es muy extraña y poco frecuente.
Una persona con
sesquipedaliofobia (nombre abreviado) evitará una conversación en la que tenga
que decir cualquier palabra grande y en algunos casos entran en un estado real
de pánico con tan solo imaginarse en una situación parecida.
La razón de esta
fobia a las palabras largas es por el miedo a trabarse o no saber pronunciarlas
correctamente y quedar en ridículo o no parecer lo suficientemente inteligente.
No existe una causa específica para la sesquipedaliofobia, pero tiende a originarse por experiencias desagradables, que nos hacen asociar un estímulo a una emoción negativa (en este caso a articular palabras largas).
Al verse envuelto en
un escenario en el que tenga que decir una palabra larga o con tan solo pensarlo,
el individuo puede experimentar determinados síntomas físicos como palpitaciones,
dolor en el pecho, sudoración, hiperventilación, temblores, náuseas… A nivel
emocional siente pérdida de control y desrealizacion.
Las relaciones
sociales y la autoestima suelen verse afectadas por la sesquipedaliofobia, y
generalmente viene acompañada de la fobia social o timidez extrema.
Entre los posibles tratamientos destacan la hipnosis, el mindfulness (conciencia plena), técnicas de relajación y expositivas como la desensibilización sistemática.
6. Crometofobia: miedo al dinero
Normalmente las personas se desviven por tener más dinero. Pero eso es sencillamente impensable para los que padecen de crometofobia, pues lo asocian con angustia o peligro.
Billetes de diferente valor amontonados unos encima de otros (Pixabay)
Una mala experiencia
frente al dinero puede desatar este miedo irracional. Un individuo que creció en
un ambiente donde sus padres se peleaban por este recurso o si, por el
contrario, la abundancia lo hizo víctima -o alguien cercano- de un secuestro,
odiará el dinero de forma inconsciente, por considerarlo el responsable de
muchos problemas.
Los signos de la
crometofobia son:
Ansiedad generalizada cuando
llegan los estados de cuenta de las tarjetas de crédito.
Desconocer la realidad
financiera o cuánto dinero se requiere para sobrevivir o con lo que se cuenta
al mes.
Desviar o evitar
conversaciones acerca de dinero.
Delegar a una pareja o
familiar para que se encargue del aspecto financiero.
La terapia
psicológica es necesaria para que el paciente reconozca la fobia y pueda
relacionarse con el dinero y tener la libertad de tenerlo y gastarlo
tranquilamente.
7. Antropofobia: miedo a las personas
En un mundo con 7,53 miles de millones de habitantes, parece ilógico tenerle miedo a la gente. Sin embargo, el significado de antropofobia es precisamente el temor injustificado a las personas, especialmente a las desconocidas.
Estudiantes charlando en la universidad (iStockphoto)
El individuo siente
pánico ante el contacto con otras personas y su compañía (no debe confundirse
con la fobia social). En algunos casos se suma el miedo patológico a ser
juzgado. Y no se manifiesta solo con desconocidos, sino también con familiares
y amigos.
Al verse envuelto en
situaciones en las que debe socializar, el sujeto comenzará a sentir los signos
típicos de un ataque de pánico y dificultad para concentrarse y hablar de forma
coherente y coordinada. Tiende, además, a ruborizarse y evitar el contacto
visual.
Hay diferentes
grados de esta fobia. En niveles mínimos puede pasar desapercibida, pero en
mayores proporciones afecta seriamente la calidad de vida, ya que interfiere
con actividades cotidianas básicas como ir a la universidad o al trabajo, hacer
las compras, ir al banco, pasear al perro…
Son muy sensibles a
las críticas y opiniones ajenas, tanto que en algunas ocasiones caen en el
victimismo. Su hipersensibilidad hace que se aíslen.
La antropofobia es
tratable a través de la psicoterapia, con la técnica de exposición progresiva.
El objetivo es evitar el aislamiento que normalmente elige el paciente, no
porque no le guste la compañía, sino por la ansiedad que le genera. Si es un
caso muy severo, el profesional recetará tranquilizantes como las
benzodiacepina o antidepresivos.
8. Somnifobia: miedo a dormir
La somnifobia o hipnofobia es el miedo absurdo a quedarse dormido. Tiene su origen en el insomnio (imposibilidad de dormir) y también en experiencias negativas relacionadas al sueño. El individuo cree que, si se duerme, no podrá despertar nuevamente.
Mujer durmiendo sobre una cama
Francisco Segarra, de la Sociedad Española del Sueño (SES), detalla que esta fobia generalmente la sufren las personas insomnes que desarrollan una especie de ansiedad anticipatoria. Es decir, les angustia tanto no poder dormir que terminan generando una fobia a la acción como tal.
En su opinión:
«El desencadenante es el insomnio, derivado del estrés o de otro problema adaptativo, y el insomnio se refuerza a sí mismo dando lugar a un círculo vicioso».
45% de la población mundial
tiene algún trastorno del sueño, siendo el más común el insomnio. Pero hay alteraciones
psicológicas como la somnifobia que causan una situación de estrés permanente.
Los síntomas son muy
concretos, y van desde falta de aire, respiración entrecortada, sensación de
pánico, temblores, ritmo cardiaco acelerado, náuseas, hasta sudoración y
somnolencia. Puede afectar a personas de cualquier edad.
Quienes padecen de
apnea, parálisis del suelo o trastornos similares, son más propensas a
desarrollar somnifobia.
Es imperativo tratar la somnifobia, para evitar afectaciones graves a la salud debido a la falta de sueño. Regularmente se aplican técnicas de Programación Neurolingüística (PNL) y el coaching ontológico, acompañado en determinados casos con tratamiento farmacológico.
9. Eisoptrofobia: miedo a los espejos
La eisoptrofobia, también llamada catoptrofobia, es el miedo inexplicable a mirarse en el espejo o estar cerca de uno.
Mujer mirándose en un espejo (123RF)
Los expertos suelen
diferenciar ambos conceptos. La eisoptrofobia se especifica como el miedo a la
imagen reflejada en los espejos, mientras que la catoptrofobia es el miedo a
los espejos como objetos.
Se trata de una
fobia específica o miedo aprendido que no afecta de forma muy negativa la
calidad de vida de un individuo, pero puede empujarlo a evitar reuniones
sociales o visitar ciertos lugares, teniendo en cuenta que los espejos son
objetos muy comunes.
Básicamente la
persona manifiesta síntomas de ansiedad generalizada si está cerca de un
espejo, tales como: respiración agitada, ritmo cardiaco acelerado, sudoración,
ganas de gritar o llorar, conducta de huida, parálisis momentánea, mareos,
náuseas, vómitos, malestar estomacal, dolor de cabeza y hasta desmayos.
Entre las causas de
esta fobia está la baja autoestima, pero más que todo está ligada a creencias y
supersticiones. En algunas culturas se piensa que los espejos son portales a lo
sobrenatural y que permiten la entrada de espíritus y entes maliciosos. También
hay quienes afirman que son observados a través de ellos.
Con terapia es
posible curarla completamente. La exposición o desensibilización pueden hacer
que el individuo mantenga un estado de calma al estar en contacto con el
objeto.
10. Demofobia: miedo a la multitud
El miedo persistente e injustificado a la multitud se conoce como demofobia. Este trastorno puede estar asociado a la claustrofobia (miedo a estar encerrado) y se presenta como un temor descabellado a los lugares donde hay mucha gente, tales como: el cine, teatro, conciertos, centros comerciales e incluso reuniones sociales.
Multitud de personas en el festival de música Tomorrowland (TomorrowWorld)
El que padece esta
condición tiene pensamientos frecuentes de que queda atrapado en una multitud
hasta la muerte, que se pierde o contrae un virus mortal.
Se piensa que la
demofobia es un miedo genético, que afecta con más frecuencia a mujeres que
hombres.
Los síntomas de este
trastorno son: ritmo cardiaco acelerado, sudoración excesiva, temblor,
hiperventilación, sensación de atragantamiento, malestar estomacal, escalofrío,
calor desmedido, mareo, desmayo, temor a perder el control o morir. En ocasiones
el miedo es tan intenso que la persona llega a sentir un fuerte dolor de pecho.
Hay varias técnicas
para que un paciente supere la fobia a la multitud, que puede llevar al
aislamiento si no se resuelve:
Asistir a eventos grupales
pequeños e ir aumentando el tamaño del grupo a medida que se vaya sintiendo
cómodo.
Decir en voz alta
afirmaciones como «estoy seguro entre la muchedumbre» o «yo
puedo con esto».
Visitar un barrio o lugares
céntricos.
Aplicar la respiración
consciente para facilitar la relajación.
Escuchar música suave en lugares
donde haya mucha gente para evitar que se desencadene un ataque de pánico.
Hablar más seguido con
familiares, vecinos o amigos.
11. Ombrofobia: miedo a la lluvia
Algunas fobias raras pasan inadvertidas porque no complican mucho la vida de quien las sufre, pero hay otras que deben ser tratadas cuanto antes. Tal es el caso de la ombrofobia o pluviofobia (del griego ombros, que significa lluvia), que se define como el temor enfermizo a mojarse con la lluvia.
Hombre contemplando la lluvia (Pixabay)
Un cielo nublado,
truenos o relámpagos pueden evocar una profunda sensación de pánico y desatar
una crisis en quienes la padecen. Incluso el olor a lluvia, que para muchos es
maravilloso, es capaz de alarmar a los individuos con este trastorno.
A la persona con
ombrofobia no solo le disgusta la lluvia, sino que sentirla o tan solo pensar
en ella puede provocar un miedo desmedido y una serie de síntomas físicos como
aumento del ritmo cardiaco, temblores, mareos, náuseas, sensación de irrealidad
y desmayos.
Además, se
obsesionan con los objetos que protegen contra la lluvia (paraguas e
impermeables), y los llevan a todos lados para sentirse seguros. También manifiestan
una necesidad constante de resguardo; es decir, buscan lugares cerrados y altos
donde estén a salvo de posibles inundaciones.
Esta fobia tiene su
raíz en experiencias traumáticas, como haber presenciado un desastre natural.
Incluso puede desarrollarse por un Trastorno Afectivo Estacional (depresión
relacionada con los cambios estacionales), que genera una respuesta sintomática
negativa ante la lluvia.
En ciertos casos
tiene que ver con la herencia genética o el miedo irracional a contraer
enfermedades provocadas por las lluvias (gripe, diarrea, dengue, paludismo,
chikungunya, leptospirosis).
La Técnica de
Programación Neurolingüística, terapia cognitivo conductual y de exposición son
la más efectivas para este tipo de fobia.
12. Hexakosioihexekontahexafobia: miedo al número 666
La hexakosioihexekontahexafobia (abreviado trihexafobia) es el miedo irracional al número 666. Es muy parecida a la tetrafobia (aversión al número 4) y octofobia (miedo al número 8) y otros casos específicos de numerofobia.
Display LED mostrando el número 666 (Picgrace)
La trihexafobia
tiene su origen en creencias religiosas y supersticiones. En el verso bíblico
Apocalipsis 13:18 destaca que el 666 es «el número de la bestia» o
satanás. Varias películas de horror y novelas han magnificado ese miedo en no
creyentes.
El
hexakosioihexekontahexafóbico tiende a evitar todo lo relacionado con este
número, como matrículas de vehículos, transportes públicos con esa numeración o
cualquier cosa que lleve un 666 escrito. Los síntomas son los clásicos de un ataque
de pánico.
Hay varios hechos curiosos acerca de la trihexafobia, que recoge Alfred López en un artículo:
La autopista 666 de Estados
Unidos fue rebautizada en 2003 como autopista 491.
En el parlamento europeo dejan
vacío el asiento 666.
El expresidente
estadounidense Ronald Reagan y su esposa Nancy Reagan cambiaron su dirección en
los Ángeles del 66 al 668.
En 1999 Moscú cambió la línea
de autobús 666 a 616. Aunque un estudio de la Universidad de Birmingham revela
que el verdadero número de la bestia no es 666, sino 616.
13. Triscaidecafobia: miedo al número 13
La triscaidecafobia (del griego treiskaideka, que significatrece) es el terror desmedido e incontrolable hacia el número 13. Es una variación muy específica de la numerofobia (como la hexakosioihexekontahexafobia).
Número 13 sobre fondo amarillo (Pantonarium)
Esta aversión se exterioriza con todo lo relacionado
a este número: el día, el número de un local, el piso de un edificio, la suma
de una cuenta, el número de placa de un auto o cualquier cosa que lo lleve
escrito o implícito.
Para algunos expertos no se trata de un trastorno,
sino de una superstición. A pesar de ello, hay personas que sienten una fuerte
ansiedad, pensamientos irracionales, ganas de huir y síntomas físicos ante el
número 13.
El origen de esta fobia proviene de la creencia de
que el número 13 representa calamidad y mala suerte. De hecho, hay refranes
populares que lo afirman: «martes 13 ni te cases, ni te embarques». Y
pasa de la superstición al trastorno por algún evento traumático ocurrido ese
día.
Un paciente con triscaidecafobia elige aislarse ese
día y evita todo contacto con el número 13. Hay varias terapias que pueden
ayudar a superar esta fobia: relajación, aproximación sucesiva, respiración
consciente y desensibilización sistemática.
14. Hilofobia: miedo a los bosques
Entre los miedos raros definitivamente destaca la hilofobia, que es la aversión hacia los bosques. Puede llegar acompañada de dendrofobia (miedo a los árboles) o xilofobia (miedo a la madera), pero son términos completamente diferentes.
Árboles cubriendo el cielo del bosque (Pixabay)
Normalmente nuestro
subconsciente percibe los bosques como lugares aterradores y llenos de peligro.
En parte porque las películas y novelas los toman como los perfectos escenarios
de terror, ayudando a maximizar ese miedo natural a los lugares desconocidos.
Pero los xilofóbicos
llevan ese temor más allá. Estar en un bosque puede sentirse como una
experiencia cercana a la muerte y llegan a experimentar síntomas físicos y
psicológicos con tan solo pensar u oír hablar de ellos (palpitaciones,
sensación de irrealidad, náuseas, mareos, desmayos…).
Las causas más
frecuentes están ligadas factores culturales o de sugestión, aunque por si
solos no bastan para crear una fobia. Generalmente quienes la desarrollan padece
de trastornos de ansiedad previos.
Por otro lado, un
episodio traumático habitualmente es el detonante para este tipo de fobias
específicas: perderse de pequeño en un bosque o cualquier momento desagradable en
este lugar.
Es fácil evitar el
estímulo que ocasiona la hilofobia, pero lo más recomendable es buscar ayuda
psicológica para evitar la aparición de nuevas fobias. La terapia cognitivo
conductual y de relajación son el tratamiento sugerido.
15. Tripofobia: miedo a los agujeros
Es un trastorno que se caracteriza por el miedo irracional y repulsión por los conjuntos de agujeros. Según la web Tripofobia.org, al menos 25% de los seres humanos la padecen, pero el Manual Estadístico y Diagnóstico de Desórdenes Mentales no la contempla aún como una fobia oficial.
Orificios de un panal de abejas (Pixabay)
Existen dos tipos de Tripofobia:
Tripofobia en la piel: Muy parecido a la dermatopatofobia (miedo a
enfermedades de la piel), con especial pánico ante afecciones de la piel con
patrones secuenciales y repetitivos.
Tripofobia extrema: Aquella en la que la tolerancia al estímulo es
mínima. La persona se siente mal con ver o imaginar un panal de abejas,
gusanera, el centro de una flor de loto…
Al estar expuesto a una imagen u objeto con estos
tipos de patrones describen reacciones físicas y psicológicas propias de una
crisis de nervios: náuseas, ritmo cardiaco acelerado, temblores, dificultad
para respirar.
Los tratamientos convencionales implican terapia de
exposición, terapia cognitivo conductual y, solo si lo amerita, la medicación.
16. Oenofobia: miedo al vino
El vino es la tercera bebida alcohólica más consumida en el mundo, y Europa es precisamente el primero en ese ranking. Con tanta incidencia mundial, es extraño que alguien desarrolle oenofobia, que es el miedo enfermizo al vino.
Reproducción digital de una copa de vino derramándose (Pixabay)
Es una de las fobias más raras y hay poca
información al respecto, pero no deja de ser real. Puede estar vinculada a la
metifobia (miedo a las bebidas alcohólicas) y dipsofobia (miedo a beber).
Las causas no están muy claras. Probablemente estén arraigadas
a experiencias traumáticas en las que el vino haya sido protagonista.
Como en la mayoría de las fobias, al estar expuesto
al estímulo que provoca el miedo se experimenta sudoración excesiva, mareos,
náuseas, respiración anormal, taquicardia, temblores, etc. No obstante, la
psicoterapia puede curar esta fobia por completo.
17. Efebifobia: miedo a los adolescentes
Si bien es cierto que los adolescentes tienden a ser problemáticos, no hay razón para temerles. Pero no todos concuerdan con esa afirmación, teniendo en cuenta que existe una fobia llamada efebifobia (del griego ephebo, que significa adolescente), que extrañamente es el miedo irracional hacia los jóvenes.
Grupo de adolescentes mirando una laptop (Pexels)
Kirk A. Astroth, investigador de la Universidad de
Arizona, fue el primero en utilizar el término en 1994. Esta fobia afecta más
que todo a individuos con edades comprendidas entre 25 y 34 años.
Los estereotipos negativos de adolescentes
irrespetuosos con sus padres, vándalos o que consumen drogas, junto con algún
trauma o estímulo en los que haya participado un joven, pueden desencadenar la efebifobia.
Este terror psicológico hacia las personas jóvenes
es peligroso, porque puede conllevar al edaísmo: discriminación por edad.
18. Pteronofobia: miedo a recibir cosquillas con plumas
No hay nada más inofensivo que las cosquillas o las
plumas, pero para algunos ambas son motivo de un terror desmedido.
Mujer a la que le hacen cosquillas con un plumero (Pexels)
La pteronofobia es una fobia muy específica que se presenta como un miedo desproporcionado a recibir cosquillas con plumas. Es lo contrario a la acarofilia, el placer de recibir cosquillas.
Evidentemente quienes las sufren no pueden mirar, tocar
ni estar cerca de una pluma. El principio de esta fobia se asocia a episodios o
malas experiencias de la niñez.
Es limitada la información sobre esta fobia, porque
afecta a muy pocas personas, pero puede estar acompañada de ornitofobia (terror
a las aves). Los síntomas varían de acuerdo al paciente, los más comunes son
una conducta de huida, llanto, gritos, ritmo cardiaco acelerado y mareo.
19. Agirofobia: miedo a cruzar la calle
Las estadísticas de atropellamientos y accidentes vehiculares en el mundo son espeluznantes, y más o menos a eso le temen los que sufren de agirofobia. En concreto, es el miedo excesivo e irracional de cruzar la calle o cualquier arteria vial por la que transiten vehículos por temor a ser atropellado.
Mujer preparándose para cruzar la calle (Pixabay)
La conducta fóbica se presenta no por la acción de
cruzar como tal, sino a la posibilidad de exponerse a lo que considera un
peligro y salir lesionado. Quienes tienen agirofobia se niegan a cruzar incluso
en los puntos designados o en una calle completamente vacía.
Normalmente experimentan pánico desmedido, miedo,
dificultad para respirar, escalofríos y ritmo cardiaco elevado si son expuestos
a ese escenario. Si se obliga al sujeto a cruzar una calle, puede vomitar y
hasta desmayarse.
Afecta en gran medida a los viven en regiones
urbanas y se convierte en un limitante al momento de salir a la calle o visitar
lugares nuevos.
Es aconsejable asistir a terapia. El objetivo será
hacerle entender al paciente que cruzar la calle no significa un
atropellamiento automático, mediante técnicas de PNL y de coaching ontológico.
20. Sofofobia: miedo al conocimiento
La frase «todos los días se aprende algo nuevo» es una verdadera pesadilla para aquellos con sofofobia. Se trata del miedo patológico a aprender cosas nuevas, aunque no siempre es generalizado (se puede temer a aprender algo en particular como música o matemáticas).
Mujer leyendo en una biblioteca (Pixabay)
No existe una causa típica, pero como se trata de
una fobia específica es probable que se desencadene por experiencias
traumáticas directas.
Pudiera pensarse que no afecta mucho la calidad de
vida, pero la sofofobia es capaz de impedir labores cotidianas (que impliquen
el estímulo que desencadena el miedo) o cumplir objetivos personales.
Falta de aliento, aumentos en la frecuencia
cardíaca, ataques de ansiedad extrema, sequedad en la boca, sudoración excesiva
y náuseas son algunos de los síntomas. El tratamiento dependerá de cada
individuo.
21. Antrofobia: miedo a las flores
La antrofobia es el temor irracional a las flores. El miedo detona en algunos por tocarlas o estar cerca y en otros por tan solo escuchar hablar de ellas o verlas en imágenes. En casos más graves pensar en flores puede desencadenar una crisis.
Flores de colores (Alamy Images)
De la antrofobia se derivan los síntomas típicos de
cualquier fobia: falta de aire, sequedad en la boca, sudoración, dolor de
cabeza, náuseas, mareos, debilidad, falta de aire y respiración agitada.
Ciertos individuos pueden manifestar una subida en la presión arterial.
Como casi todas las fobias raras, se originan de
traumas pasados. El subconsciente reacciona a ese estímulo y lo asocia al
peligro.
Las terapias también son las mismas que para otras
fobias (cognitiva y de exposición), aunque se puede recurrir a otras más
agresivas como la terapia de choque.
22. Aurofobia: miedo a las auroras boreales
Para muchos las auroras boreales son un espectáculo único, y para otros una experiencia aterradora. La aurofobia está catalogada como una fobia meteorológica, junto a la selenofobia (miedo a la luna), eosofobia (miedo al amanecer) y quionofobia (miedo a la nieve).
Hombre contemplando la Aurora Boreal (Pixabay)
Si bien se trata de un fenómeno meteorológico
inofensivo, el sujeto con aurofobia lo percibe como motivo de miedo irracional.
Los expertos consideran que este tipo de fobias son
hereditarias, pero también pueden salir a relucir por eventos desafortunados
del pasado (traumas). En Islandia, por ejemplo, las auroras boreales causan
accidentes.
Generalmente se manifiesta en edades tempranas. Aunque
no es un limitante, lo más sano es recurrir al profesional para curar la fobia
a través de terapias de exposición gradual.
23. Fagofobia: miedo a tragar
La fagofobia es el miedo desmedido a la acción
natural de tragar. El sujeto siente temor a atragantarse y evita ingerir
cualquier alimento.
Si no se trata a tiempo, puede provocar desnutrición, anorexia, aislamiento y depresión. Los síntomas físicos y psicológicos son prácticamente iguales a los de cualquier fobia específica, con el agregado de una manifestar sensación de ahogo, asfixia o falta de aire y alteraciones gástricas y dolores estomacales.
Hombre comiendo espaguetis (iStockphoto)
La predisposición genética es una de las causas de
esta fobia.
En el 73,17% de los casos publicados la terapia
cognitivo conductual ha dado resultados. Cristina Wood, experta en trastornos
de la ansiedad y el estrés, considera que «lo que hay que hacer es una
reestructuración cognitiva». Es decir, cambiar la forma de pensar del
paciente.
24. Ecofobia: miedo al hogar
La ecofobia, que se define como el miedo irracional y enfermizo hacia el hogar, hace que las personas sientan pánico de estar en sus casas o regresar a ellas.
Familia reunida viendo la televisión (123RF)
Está motivada por eventos traumáticos. Un sujeto que
haya sufrido abusos en su hogar puede desarrollar ecofobia. Casi siempre están
a la defensiva y evitan cualquier tipo de ambiente familiar.
Puede limitar la vida normal del individuo y
conducirlo al aislamiento, por eso se recomiendan las terapias conductivas y
técnicas PNL.
25. Koumpounofobia: miedo a los botones
Entre las fobias y miedos más raros llama la atención la koumpounofobia, que es el temor irracional a algo tan inofensivo como los botones.
Botones de diversos colores (123RF)
Existen varios grados de esta afección. Hay quienes
sienten aversión a los botones y ojales, y se limitan a usar ropa con velcro o
cremallera. En casos más graves, incluso se sienten mal con verlos en las
prendas de otras personas.
Pareciera que no afecta la calidad de vida, pero es
prácticamente imposible evitar ver botones. Este terror se origina por
experiencias traumáticas y trastornos de ansiedad previos.
Al estar frente al estímulo (botones) el sujeto
puede sentir mareos, náuseas, sensación de asfixia, palpitaciones, sensación de
irrealidad o incluso ataques de pánico. La terapia cognitivo conductual y la
hipnosis (para descubrir el origen) son las más adecuadas.
26. Latrofobia: miedo a los médicos
El chequeo anual de la salud puede convertirse en un amargo momento para los latrofóbicos. Esta repulsión excesiva e incontrolable hacia los médicos surge por traumas de la infancia o experiencias desagradables durante una visita al hospital.
Médicos en una sala de operaciones (Pixabay)
Los síntomas pueden ser físicos (náuseas, vómitos,
aumento de la frecuencia cardiaca, respiración anormal, dolor de cabeza,
aumento de la tensión muscular, problemas gástricos como diarrea), cognitivos
(especulaciones obsesivas, imágenes mentales catastróficas, miedo a perder el
control) y conductuales (evitar el encuentro con el médico, angustia,
ansiedad).
Los tratamientos que utilizan técnicas de
reestructuración cognitiva y desensibilización sistemática son los que eligen
los profesionales para tratar esta fobia específica.
27. Optofobia: miedo a abrir los ojos
La optofobia es el terror injustificado a un acto reflejo tan normal como abrir los ojos. Se presenta en determinadas situaciones y normalmente está asociada con el miedo de ver la realidad.
Hombre con los ojos cerrados (Depositphotos)
No hay mucha información sobre esta fobia, ya que se
trata de un trastorno muy raro y que pocos padecen, pero puede derivarse de
episodios traumáticos. Abrir los ojos en la mañana puede desatar sentimientos
de angustia y pánico en un optofóbico.
Si este miedo se convierte en perjudicial o
limitante para llevar una vida normal, es aconsejable tomar terapia psicológica
acompañada de técnicas de PNL y coaching ontológico.
28. Papirofobia: miedo al papel
La papirofobia (del griego papyro, que significa papiro) es el miedo patológico e irracional al papel. Podría pensarse que solo se desencadena con hojas en blanco, pero puede presentarse de muchas formas: por un papel arrugado, hojas mojadas, un libro…
Hojas de papel de colores (Pixabay)
Es difícil determinar una causa específica, porque
esta fobia suele originarse en experiencias traumáticas de la niñez o juventud.
Dependiendo de la intensidad, es capaz de afectar el ritmo de vida, pues hay papel
en prácticamente todos lados.
El individuo experimenta ataques de pánico,
acompañado de otros síntomas físicos, en presencia del papel. Entre los
tratamientos destacan: terapia psicológica, hipnoterapia, grupos de apoyo,
técnicas de relajación y terapia cognitivo conductual.
29. Barofobia: miedo a la gravedad
Cuando Newton descubrió el concepto de gravitación, probablemente no pensó que existiría la barofobia. Esta fobia es el miedo exagerado a la fuerza de gravedad, y se manifiesta de diferentes formas.
Niña saltando en un puente de madera (Pixabay)
Una persona con barofobia tiene pensamientos obsesivos
sobre que la fuerza de gravedad se altere y todos queden aplastados por ella o
que todo quede suspendido en el aire. Una foto en el ordenador del espacio o de
algo cayendo puede desencadenar una crisis.
La caída de un edifico alto y hasta problemas para
entender el concepto de gravedad pueden ser los causantes de esta fobia
específica, aunque lo más probable es que se desarrolle por un trastorno de
ansiedad previo.
El tratamiento más eficaz es la terapia cognitivo
conductual y las técnicas de relajación para disminuir la ansiedad.
30. Anablefobia: miedo a mirar hacia arriba
Entre las cosas extrañas del mundo que dan miedo definitivamente está la anablefobia, que es el miedo irracional a mirar hacia arriba. En algunos casos está asociada al vértigo (sensación de movimiento o giros).
Vista del cielo desde una arboleda (Best Wallpaper)
Quienes sufren de anablefobia presentan sensación de
mareo si levantan la mirada. Puede provenir de la incomprensión por la
inmensidad del cielo, por el miedo a objetos que pueden caer desde arriba o por
una sensación de inferioridad. Los lugares con techos altos también pueden
desencadenar esta fobia.
Los síntomas son los típicos de cualquier tipo de
fobia (sensación de irrealidad, mareo, náuseas…) y se pueden aplicar varias
terapias psicológicas como la cognitivo conductual para superarla.
31. Escriptofobia: miedo a escribir en público
Erróneamente se cree que la escriptofobia es el miedo a escribir. Pero, de hecho, se trata al pánico desmedido que experimenta quien la sufre de hacerlo al público.
Grupo de estudiantes tomando notas de un libro (123RF)
Más que todo es el miedo a ser juzgados por su letra o por sus escritos. Esta es una fobia muy específica que se origina por malas experiencias (una mala crítica o humillación) o por un trastorno de ansiedad previo. Obligar a una persona con esta fobia a escribir puede desatar una crisis de ansiedad.
La exposición gradual a la fuente del miedo es la
terapia más usada para curar este tipo de fobia; es decir, que el afectado
escriba unas pocas líneas en público en compañía del psicólogo.
32. Fobofobia: Miedo al miedo
La fobofobia es un miedo irracional bastante curioso y contradictorio, pues básicamente es una fobia a las fobias. Esta conducta obsesiva es característica de las personas que sufren de ansiedad.
Niño asustado escondido bajo varios cojines (Pixabay)
Puede afectar seriamente la normalidad del día a
día, ya que la persona vive en constante exaltación ante la posibilidad de
vivir situaciones que causen angustia. Y terminan padeciendo los síntomas
clásicos de la ansiedad (palpitaciones, mareos, perdida de concentración).
«Cada vez que
sienten síntomas de la ansiedad, algo muy frecuente en el día a día, las
personas se asustan, interpretan que algo muy malo les está pasando. Y
se forma un bucle que le produce
una fuerte ansiedad».
33. Fronemofobia: miedo a pensar
El simple hecho de pensar es una tortura para quienes padecen de fronemofobia. Surge por experiencias traumáticas o situaciones de emergencia en la que se requiere tomar una decisión trascendental.
Mujer sentada en un banco pensado (Pixabay)
Un paciente con fronemofobia desarrolla miedo a los
pensamientos. Es muy perjudicial, porque le impide tomar decisiones y conducir
su vida como mejor le parezca.
Los síntomas de la fronemofobia son: aislamiento
social y depresión. Evitan conversaciones y lo más peligroso es que buscan
entrar en estados de inconciencia como sueño inducido, coma y hasta la muerte.
Se requieren repetidas sesiones psicológicas para
superar esta fobia, en las que se aplicarán: terapias de relajación, hipnosis y
programación neurolingüística.
34. Helenologofobia: miedo a los términos griegos
Una de las fobias más raras es la helenologofobia, que se define como el miedo desmedido e irracional a los términos griegos. Quienes la sufren consideran que estos conceptos son muy difíciles.
Escrito griego tallado en piedra (Depositphotos)
Teniendo en cuenta que se trata de un trastorno
bastante especifico, hay poca información disponible. En casos más arraigados,
la persona evita lecturas con términos griegos y hasta repele el país (tan solo
imaginarse en Grecia originar una crisis de nervios).
35. Blenofobia: miedo a la viscosidad
Las sustancias viscosas son repugnantes, pero para quienes padecen de blenofobia son motivo de terror desmedido. Temen específicamente a que un elemento viscoso pueda llegar a sofocarlos.
Líquido verde viscoso (Pixabay)
Entre las cosas que les repugnan se encuentran: el
lodo, la clara del huevo, carne cruda, peces, serpientes, caracoles, babosas,
fluidos corporales (propios o ajenos).
Los síntomas de la blenofobia son: hiperventilación,
náuseas, mareos, sudoración, aumento de la frecuencia cardíaca, sensación de
ahogo y desmayo.
Esta fobia tiene su motivación en experiencias negativas
y estímulos que el cerebro asocia como peligrosos. Haberse ahogado con una
sustancia viscosa, por ejemplo, puede desencadenarla.
El tratamiento más exitoso para estas fobias es la
restructuración cognitiva, así como la exploración introspectiva, la exposición
por imaginación, las técnicas de relajación y la desensibilización sistemática.
36. Panofobia: miedo a todo
La panofobia o pantofobia es conocida como el miedo no especifico o miedo a todo. No existe una clasificación concreta para esta fobia, pero se cree que está ligada a otras patologías como el trastorno de ansiedad generalizada, la esquizofrenia o el trastorno límite de personalidad.
Niña asustada ocultando el rostro (Pixabay)
Proviene del griego panto, que significa todos, y de
phobos, que se traduce como miedo. Se
asocia al dios griego Pan, al que se le atribuía la generación del miedo
enloquecedor.
Afecta en gran medida la calidad de vida de quien la
padece, puesto que se mantiene en un estado de preocupación excesiva por una
amenaza o acontecimiento inexplicable. Es capaz de modificar el comportamiento
del individuo.
Las causas no se han determinado aún, pero usualmente
proviene de fobias específicas previas, cuyo temor termina magnificándose. Es
esencial acudir a terapia para combatir los síntomas, que van desde el miedo irracional
a objetos, situaciones, personas y animales, hasta un estado permanente de
hipervigilancia.
37. Eufobia: miedo a las buenas noticias
Es una condición muy extraña que se caracteriza por el miedo desproporcionado a escuchar buenas noticias. Guarda relación con la mitofobia (miedo a la mentira).
Mujer asustada sentada en el suelo (Pixabay)
La decepción ante una falsa buena noticia puede ser el
detonante de la eufobia. Eso lleva a la persona a preferir las emociones
negativas y el caos, lo que probablemente reduzca su grupo social. En su mente,
las malas noticias expresan realidad.
Un cuadro de ansiedad generalizada, acompañado de
síntomas físicos, puede aparecer ante una buena noticia.
El tratamiento para la eufobia incluye psicoterapia
conductual y medicación para aquellos que manifiestan ansiedad severa.
38. Ripofobia: miedo a defecar
No hay forma de evitar las necesidades fisiológicas. Eso supone un gran problema para los ripofóbicos, que desarrollan un miedo patológico a evacuar.
Hombre sentando en el retrete (Pixabay)
Esta fobia (que está estrechamente ligada a la
misofobia o miedo a la suciedad) tiene su origen en experiencias traumáticas al
momento de ir al baño, como el estreñimiento. El dolor al momento de defecar
hace que la persona, sobre todos los niños, haga todo lo posible por evitar el
acto en sí.
Si no se trata a tiempo, puede causar daños
irreversibles en los intestinos. Además de que disminuye la vida social del
individuo, por el temor a experimentar un cuadro ansioso en público.
El tratamiento de esta fobia es bastante específico.
Consta de planes de alimentación (dieta rica en fibra) para evitar el
estreñimiento y laxantes, acompañados de sesiones de psicoterapia conductual.
39. Textofobia: miedo a las telas
Es la aversión a determinadas telas o tejidos, pero no a todas en específico. Un textofóbico puede tener miedo de tocar la seda o el terciopelo.
Cortes de telas de distintos colores (123RF)
El individuo con textofobia tiende a evitar las
prendas de vestir o de cama con el tejido que le causa pavor, así como las
tiendas. Además, huyen de personas con ropa hecha del material que les causa
aversión.
Se trata de una fobia específica que aparece por
traumas o experiencias negativas y es perfectamente curable con terapia de
exposición y programación neurolingüística.
40. Tricofobia: miedo al pelo
La tricofobia o caetofobia es el miedo irracional a los pelos, ya sea a tener que verlos o tocarlos. Es más frecuente en las mujeres, por el rechazo patológico de tener vellos en la cara.
Mujer rubia de pelo largo (Pixabay)
La gravedad depende del individuo y normalmente
aparece por el condicionamiento clásico (que es la adquisición de conductas por
observación). Aunque también existe posibilidad de que sea por un factor
genético.
Se caracteriza por: el miedo desproporcionado ante
el estímulo, sensación de falta de control y necesidad de evitación. Con
síntomas comunes de las fobias, como: ansiedad desmedida, náuseas, sudoración,
resequedad en la boca, latidos cardiacos acelerados y escalofríos.
No representa un riesgo para la vida, pero puede ser
un limitante. Se recomiendan terapias psicológicas, Técnicas de Programación
Neurolingüística (PNL) y de coaching ontológico.
Fobias raras y graciosas
Hay algunas fobias raras y graciosas que parecen
inventadas, pero son muy reales y pueden hacer pasar un mal rato a quien las
sufra.
41. Omfalofobia: miedo a los obligos
La omfalofobia es el miedo irracional e incontrolable hacia los ombligos. Para algunos suena absurdo temerle a una parte del cuerpo, pero para los omfalofóbicos el hecho de tocar su propio ombligo puede generar extrema incomodidad y los clásicos síntomas de ansiedad.
Mujer en bikini caminando por la playa (Pixabay)
Es difícil establecer una causa concreta, pero suele
estar ligada a un trastorno de ansiedad que promueve pensamientos
distorsionados acerca del ombligo.
Más allá de dificultar la higiene diaria y de evitar
lugares como la playa, donde la gente exhibe sus ombligos, la omfalofobia no
afecta mucho el estilo de vida de la persona. No obstante, es recomendable
aplicar la terapia cognitivo conductual para eliminar la conducta de evitación.
42. Papafobia: miedo al Papa
La papafobia, como su nombre lo indica, es la aversión a la figura del Papa (máxima autoridad de la iglesia católica) y a todo lo relacionado con él. Está asociada a la hierofobia (temor a los sacerdotes y cosas sagradas) y a la hagiofobia (miedo a los santos).
El Papa Francisco durante una visita a México (Getty Images)
Probablemente tenga su origen en el miedo natural a
lo desconocido o lo sagrado, sumado a problemas previos de ansiedad. También
puede deberse a experiencias traumáticas.
De cualquier forma, basta con mantenerse alejado
dela Santa Sede o de cualquier cosa que evoque al Papa para evitar la ansiedad.
Aunque no se descarta la terapia.
43. Pogonofobia: miedo a las barbas
La barba se asocia a la virilidad, sabiduría o estatus social en los hombres, pero hay quienes no las toleran. El término pogonofobia se acuño en 1851 para referirse al miedo desproporcionado hacia las barbas.
Hombre hipster con barba (Huffington Post)
Hay quienes temen solo a los bigotes y otros a las
barbas completas. De acuerdo al nivel de miedo, se pueden presentar:
palpitaciones, sudoración, ansiedad extrema, náuseas, vómito, boca seca,
confusión, falta de concentración y dificultad para respirar.
Tiene su origen en el condicionamiento clásico o
condicionamiento precario (observación de una conducta). Una mala experiencia
que involucre una barba puede ser el detonante.
Es necesario acudir a terapia, pues es prácticamente
imposible evitar a personas con barbas. La meta es prevenir el aislamiento al
que puede someterse la persona a través de las técnicas de relajación y las
técnicas de exposición.
44. Bromidrosifobia: miedo al olor corporal
El mal olor causa repulsión, pero para las personas que sufren de bromidrosifobia cualquier olor corporal puede generar un verdadero episodio de ansiedad.
Pareja en una cafetería (Freepik)
Tiene su origen en una experiencia traumática. Si la
persona pasó un momento desagradable en el que lo único que puede recordar es
un intenso mal olor corporal, puede desarrollar bromidrosifobia.
Los síntomas son: aumento del ritmo cardiaco,
sensación de asfixia, miedo, dolor de cabeza, mareos y ataque de pánico.
La terapia psicológica es prácticamente obligatoria
para este tipo de fobias, combinada con técnicas de relajación para reducir la
ansiedad.
45. Vestifobia: miedo a la ropa
La vestifobia se manifiesta como el miedo a la ropa o a vestirse. Puede parecer muy gracioso que alguien tema a algo tan inherente a los seres humanos como la ropa, pero puede limitar la vida diaria de la persona.
Interior de una tienda de ropa (Pixabay)
Los científicos han determinado que el temor a los
espacios pequeños (claustrofobia) es una constante en los pacientes con
vestifobia. También está estrechamente ligada a la bacteriofobia (miedo a los
gérmenes y bacterias). Entonces el miedo no es a la ropa como tal, sino a
sentirse apretado en ella o que esté contaminada.
Los síntomas generales incluyen: sensación de
asfixia, temblores, desmayos, llanto incontrolable y pánico.
Son necesarias sesiones de psicoterapia y técnicas
de desensibilización para ayudar al individuo a sentirse cómodo con la ropa.
46. Ciberfobia: miedo a los ordenadores
La ciberfobia es una fobia de reciente data que se caracteriza por el miedo racional a trabajar con ordenadores y todo lo relacionado a ellos. Fue el terapeuta Craig Brod que acuñó el término en 1985 para exponer el temor a las nuevas tecnologías y la ansiedad que provocan.
Ordenadores sobre una mesa de trabajo (Pixabay)
El miedo a lo desconocido es una de las causas más
frecuentes de la ciberfobia, que tiene mayor incidencia en personas mayores de
40 años que en jóvenes. Rosa Faraj, investigadora de la Pontificia Universidad
Católica de São Paulo, reveló que:
«No es el miedo de la propia máquina, sino para mostrar su propia incapacidad para utilizar la máquina».
Puede limitar el entorno laboral y social, puesto
que en prácticamente todos lados hay un ordenador.
47. Automatonofobia: miedo a las cosas animadas
La automatonofobia es el miedo irracional a las cosas animadas que representan falsamente a un ser sensible: muñecos ventrílocuos, muñecos inanimados, criaturas animatrónicas, maniquíes y hasta estatuas de cera.
Dibujos animados de Dora la exploradora
Es mucho más frecuente en niños y adolescentes.
Suele originarse por experiencias desagradables ligadas a alguna película o
historia de terror que cala en la psique del niño. En el caso de los adultos,
esta fobia aparece como consecuencia de algún momento traumático en el que
estuvo presente alguna de estas figuras.
Los síntomas son: ansiedad ante objetos que
representan personas, pesadillas, taquicardia, sudoración, conducta de huida y
tensión muscular.
El tratamiento más eficaz para calmar la ansiedad
generada por este tipo de fobia es la terapia psicológica, específicamente la
desensibilización sistemática.
48. Zemifobia: miedo a los topos
Muchos piensan que los topos son animales muy cómicos y hasta tiernos, pero otros difieren de esa afirmación.
Rata-topo ciega descansando sobre una piedra (GNU)
La zemifobia es el miedo irracional a los topos. No
tiene una causa específica, sino que está asociada a alguna experiencia
traumática de la niñez o adolescencia vinculada a los topos.
En niveles mínimos no supone un problema, porque es
sencillo evitar el estímulo que desencadena la fobia. Pero hay quienes
experimentan un cuadro de nerviosismo, sudoración y ritmo cardiaco acelerado si
oye la palabra topo o piensa en ellos.
Se puede superar completamente esta fobia con
terapias psicológicas, técnicas de PNL y de coaching ontológico.
49. Apeirofobia: miedo al infinito
La apeirofobia hace referencia al temor excesivo e irracional al concepto del infinito. Está clasificada como trastorno de ansiedad, y la persona que la sufre puede sentirse verdaderamente agobiado con tan solo tener un pensamiento intrusivo sobre el infinito o la eternidad.
Muelle que se adentra en el mar (Pixabay)
Sin lugar a duda, esta fobia es una de las cosas
raras del mundo que pueden evocar un profundo pánico en una muy reducida parte
de la población. Hay ciertos estímulos que pueden desencadenar una crisis: el
cielo, el mar, secuencias numéricas interminables y la introspección.
El foco del miedo es algo abstracto, intangible. Las
causas pueden estar asociadas a factores genéticos y medioambientales, sociales
y de aprendizaje.
Una de las características de los apeirofobia es la
necesidad constante de mantener todo en orden y bajo control. Suelen llevar una
vida previsible y evitan los momentos de relajación e introspección.
Suele abordarse a través de la terapia cognitivo
conductual o el mindfulness, aunque pocas
veces los síntomas desaparecen por completo.
50. Teofobia: miedo a la religión
También conocida como zeusofobia, consiste en el miedo anormal a los dioses y la religión. Quienes padecen este tipo de fobia evitan incluir la religión entre sus temas de conversación y su vida diaria. Tampoco pertenecen a ningún tipo de culto religioso.
Monje budista contemplando la naturaleza (Pixabay)
Debido a que es una fobia rara y poco común, a menudo
es confundida con el ateísmo. Además, suele asociarse erróneamente con el temor
a Dios.
Los pacientes que padecen de teofobia pueden
presentar síntomas como: ataques de ansiedad, falta de respiración, aumento de
la frecuencia cardíaca, ataques de pánico y aislamiento social.
Este tipo de fobia se desarrolla luego que la
persona empieza a cuestionar la veracidad de las religiones, con preguntas
como: ¿cuál de todas las religiones es la más acertada? La ausencia de
respuestas para estas interrogantes puede ser el detonante. Sin embargo, no
todos los pacientes con dudas existenciales sobre la religión padecen de
teofobia.
El tratamiento más recomendado es la psicoterapia,
en concreto terapias graduadas de exposición. Dependiendo del nivel de los
síntomas, el profesional también podría recurrir al uso de medicamentos.
51. Genufobia: miedo a las rodillas
La genufobia es la sensación de miedo o temor irracional y persistente a las rodillas. Al igual que la mayoría de las fobias, el nivel de genufobia varía entre los pacientes de forma muy amplia. Algunos solo temen a las rodillas descubiertas en persona, mientras que otros no pueden verlas incluso en películas o fotografías. Además, las personas pueden temerle a todas las rodillas o solo a las propias.
Rodillas de un futbolista en el campo (Pixabay)
Los pacientes con genufobia pueden manifestar
pánico, aumento del ritmo cardiaco, dificultad para respirar, escalofríos y
ansiedad si ven, tocan o incluso piensan en rodillas.
Por lo general se desencadena por una experiencia
negativa relacionada con las rodillas, como una lesión traumática que puede
haberle ocurrido al paciente o a alguien cercano. Las experiencias de la niñez
también pueden influir, como una educación excesivamente religiosa o
culturalmente conservadora en la que está prohibida mostrar las rodillas.
El tratamiento recomendado para esta fobia, en caso
de ser muy grave, es la asistencia profesional con un terapeuta que usará
técnicas de desensibilización y PNL para tratar la fobia.
52. Araquibutirofobia: miedo a la mantequilla de cacahuete
Se trata específicamente del miedo a que la mantequilla de cacahuete se pegue al paladar e impida masticar, respirar o tragar. Los síntomas de esta fobia varían, pero la mayoría de los que la sufren manifiestan agitación, náuseas, sudoración o mareos al ver mantequilla de cacahuete.
Rebanada de pan untado con mantequilla de cacahuete (Pixabay)
La causa podría estar motivada por ideas pocas
realistas sobre este alimento, generalmente adquiridas del entorno, o al
observar a alguien con esta fobia (estímulo aprendido). También puede estar
relacionada a trastornos alimentarios, por lo que los pacientes con esta fobia
a menudo deben ser evaluados para otros problemas de salud mental.
El tratamiento incluye terapia psicológica o
psiquiátrica (si viene acompañada de otros trastornos alimenticios). Pero
generalmente se trata con técnicas cognitivo conductuales.
53. Gerontofobia: miedo a los ancianos
La gerontofobia es el miedo y rechazo a los ancianos. Esta es una fobia muy común en la época actual, donde los ancianos son dejados en asilos y a menudo abandonados a su suerte. Es lo contrario de la efebifofia (miedo a los adolescentes).
Anciano sentado en un banco frente al río (Pixabay)
Este miedo surge de pensamientos en los que los
ancianos son improductivos, dependientes y una carga para la sociedad. Además,
también suelen ser asociados con el desgaste del cuerpo o la enfermedad. No se
descartan las experiencias traumáticas como detonante.
Los gerontofóbicos suelen sentirse mal al reconocer
esta aversión y por lo general sufren de culpa, confusión, incontinencia e
inmovilidad al ser señalados por su fobia.
El tratamiento señalado incluye la terapia grupal,
además de las sesiones con el psicólogo.
54. Uranofobia: miedo al cielo
La uranofobia es el miedo irracional al cielo. Los que la padecen manifiestan cuadros de ansiedad, en algunos casos severos, con tan solo pensar en la idea de que exista un paraíso.
Cielo lleno de nubes sobre un paisaje montañoso (Pixabay)
Se deriva de la tanatofobia (miedo a morir) y de la
estigiofobia (miedo al infierno). En la mayoría de los casos aparece o en la
infancia o en la mitad de la tercera década de vida.
Normalmente la desarrollan personas que fueron
criadas en un hogar religioso, que piensan que no han hecho suficientes cosas
buenas durante su vida como para ascender al cielo. Una experiencia traumática
cercana a la muerte puede ser otra de las causas.
Es tratable mediante la terapia conductual o
cognitiva y en algunas ocasiones se recetan fármacos.
55. Filematofobia: miedo a los besos
La filematofobia es la aversión exagerada a los besos. En algunos casos puede estar ligada a la bacteriofobia (miedo a las bacterias), misofobia (miedo a la suciedad), halitofobia (miedo al mal aliento) o afenfosfobia (miedo a ser tocado).
Beso entre un hombre y una mujer (iStockphoto)
Esta fobia puede aparecer por el temor irracional de
la persona a no saber besar o por el miedo de contagiarse con una enfermedad a
través del beso. También es posible que se genere por una experiencia
traumática previa, aprendizaje asociativo o condicionamiento clásico.
Los síntomas son: hiperventilación, sudoración,
aumento de ritmo cardiaco, opresión en pecho, boca seca, náuseas, mareos,
náuseas, mareos y conducta de evitación.
El miedo a los besos se supera mediante la terapia
cognitivo conductual y técnicas de reestructuración cognitiva, de habilidades
sociales y de relajación.
56. Penterafobia: miedo a la suegra
La penterafobia se define como el miedo irracional a las suegras y, aunque suene gracioso, puede afectar la vida en pareja de quien la padece. Esta fobia a menudo suele confundirse con simple rechazo hacia la madre del novio o esposo, pero va mucho más allá.
Hombre siendo reprendido por su suegra (Tops Images)
Los síntomas comunes de la penterafobia son:
ansiedad, mareos, sudoración, dolor de cabeza, náuseas y ataques de pánico.
Por lo general aparece por un trastorno previo de
ansiedad que hace que se produzcan miedos ante cualquier estímulo, aunque no se
elimina la posibilidad de que esté condicionada por experiencias traumáticas
del pasado.
Es necesario acudir al profesional para tratar esta
fobia con terapia cognitivo conductual.
57. Basofobia: miedo a caer
La basofobia es el nombre que se le da al miedo extremo e irracional a caer. Los que la padecen se sienten incapaces de caminar o estar de pie por motivos psíquicos o emocionales. En la mayoría de los casos no sufren ningún trastorno que les impida hacerlo, más que el miedo a caer.
Hombres practicando paracaidismo (Pixabay)
El término proviene del griego basis, que significa paso, y de phobos,
que se traduce como miedo. La mayoría de las personas que desarrollan este
miedo han sufrido accidentes graves en los que fueron enyesados o estuvieron
inmovilizados durante algún tiempo.
Solo pensar en levantarse y caer puede generar
emociones negativas y síntomas físicos como: ataque de pánico, mareos, náuseas,
temblores, sudoración excesiva.
El tratamiento para esta fobia es la psicoterapia,
específicamente la programación neurolingüística, la terapia de exposición
directa y la fisioterapia.
58. Nomofobia: miedo a salir sin teléfono móvil
El término nomofobia proviene del anglicismo no-mobile-phone-phobia. Básicamente es la dependencia al móvil llevada al extremo de que salir sin él puede generar una ansiedad extrema. Tiene sentido, si se toma en cuenta que un usuario revisa unas 34 veces por día su teléfono celular.
Hombre sujetando un teléfono móvil con la mano (Pixabay)
Puede parecer una simple adicción a este aparato
tecnológico, pero en realidad oculta un profundo problema psicológico. Hasta el
momento se conoce que el 6 % de la población mundial tiene nomofobia.
Salir de casa sin su teléfono móvil puede provocar
algunos síntomas en un nomofóbico, tales como: ansiedad, taquicardia,
pensamientos obsesivos, dolor de cabeza y dolor de estómago.
Este trastorno se asocia a problemas de autoestima y
de relación, y la inseguridad suele ser la causa más común. Es más notable en
los niños y jóvenes, que son más propensos a sufrir fobias como consecuencia de
la dependencia a las nuevas tecnologías.
Se requiere de una terapia especializada para ayudar
al paciente a eliminar la dependencia y dependerá del grado de autocontrol de
cada paciente. En casos más extremos puede usarse terapia de choque.
59. Atomosofobia: miedo a las explosiones atómicas
Esta fobia se define como miedo persistente a las explosiones y armas atómicas, más que todo en base a la expectativa de que se produzca un fenómeno de este tipo en lugar cercano.
Reproducción de una explosión nuclear (Pexels)
Los síntomas varían de acuerdo al paciente, pero los
más comunes son: náuseas, sudoración excesiva, temor o ansiedad, debilidad,
mareos. Además, podrían estar acompañados de ataques de pánicos y sus síntomas
propios como respiración agitada, frecuencia cardíaca rápida o irregular, falta
de aire y presión arterial alta.
La atomosofobia no tiene una causa específica, pero
pueden existir situaciones que lleven al paciente a desarrollar este trastorno,
como exposición a una experiencia traumática relacionada con explosiones
nucleares reales o imaginadas.
Afortunadamente, al igual que todas las fobias, la
atomosofobia puede ser tratada por profesionales de la psicología con desensibilización
sistemática (usando formas de realidad virtual).
60. Onomatofobia: miedo a los nombres
La palabra «onomatofobia» surge como resultado de la unión de dos términos griegos: «ónoma», que significa «nombre» y «phobos», que es «miedo» o «temor».
Cuadro con un dibujo tipo cómic con el nombre «Lucas» (Tops Images)
Por lo tanto, esta fobia supone un miedo irracional, patológico y enfermizo a los nombres o a ciertas palabras en particular.
El tratamiento que suelen llevar a cabo los psicoterapeutas para paliar este tipo de fobias es la psicoterapia.
20 famosos que tienen fobias raras
1 de cada 23
personas en el mundo sufre de alguna fobia, y los famosos no escapan de esas
estadísticas. Sigue leyendo para saber cuáles artistas padecen de fobias raras.
1. Orlando Bloom: zoofobia
A Orlando Bloom lo conocemos por su actuación en grandes producciones como «El Señor de los Anillos», pero pocos sabían acerca de su aversión a los cerdos. No existe un nombre para este tipo de fobia, sino que se trata de un tipo específico de zoofobia. Este miedo irracional curiosamente surgió después de que durante la grabación de «El Reino de los Cielos» escapara una manada de cerdos en el set.
Orlando Bloom
2. Megan Fox: papirofobia
Ya habíamos mencionado que la papirofobia es el miedo irracional al papel. Megan Fox siente una fuerte aversión por el papel seco y eso dificulta una parte importante de su carrera: leer los libretos. Para hacerlo debe tener un vaso de agua cerca que le permita mojarse los dedos.
Megan Fox
3. Billy Bob Thornton: miedo a las antigüedades
Este actor, director de cine y músico estadounidense siente un terror desmesurado por las antigüedades, que puede derivarse de la ecofobia (miedo al hogar). Y no es el único, ya que en EEUU al menos 250 mil personas la sufren.
Billy Bob Thornton
El propio actor
contó que surgió de forma repentina después de que miró unos muebles del siglo
XVIII:
«De repente sentí un gran miedo, no podía comer, no podía beber, ni siquiera podía respirar».
4. Tyra Banks: ictiofobia
La supermodelo Tyra
Banks parece no temerle a nada, excepto los delfines. Esta fobia está
relacionada a la ictiofobia, que es la aversión a los peces. La estrella
declaró:
Tyra Banks
«Crees que un delfín es dulce y amable, pero para mí, no lo es».
Y además reveló que siente ansiedad y pánico al ver e incluso hablar o pensar sobre delfines.
5. Christina Ricci: botanofobia
A Christina Ricci la recordamos como la sombría Merlina Addams. Sufre de una extraña fobia conocida como botanofobia, que es el miedo irracional a las plantas.
Christina Ricci
Ella ha confesado en varias oportunidades que puede sufrir de mareos y hasta desmayarse si llega a tocar una planta:
«Si tengo que tocar una me da asco al instante, y más por el hecho de que están dentro de la casa, pues la ensucian».
6. David Beckham: ataxofobia
El famoso exfutbolista británico siempre luce perfecto, pero tiene miedos como cualquier otro. En varias oportunidades ha confesado lo mucho que le incomoda el desorden. A esta conducta se le conoce como ataxofobia (miedo al desorden) y puede llegar a provocar mucha ansiedad en quien la padece. También padece de ranidafobia (aversión a las ranas).
David Beckham
7. Woody Allen: panofobia
El excéntrico director de cine sufre de panofobia, que se caracteriza por el terror hacia cualquier situación que pueda considerar amenazante. Allen siente aversión por: los insectos (entomofobia), los espacios cerrados (claustrofobia), las multitudes (demofobia), los niños (pedofobia), los ciervos (zoofobia) y las alturas (acrofobia).
Woody Allen
8. Nicole Kidman: papilofobia
La actriz
estadounidense no tolera las mariposas. A esta fobia se le conoce como
papilofobia, y de hecho su temor es tan grande que aseguró que:
Nicole Kidman
«Si veo a una en la puerta de mi casa, soy capaz de saltar la reja y subir por la ventana con tal de evitarla».
9. Jennifer Aniston: aerofobia
La actriz de la popular serie Friends sufre de aerofobia (miedo a volar) y confesó que cada vez que debe subirse a un avión necesita tomar tranquilizantes. Esta fobia se desencadenó tras una experiencia desagradable durante un vuelo en medio de una tormenta.
Jennifer Aniston
10. Madonna: brontofobia
La Reina del Pop reveló que le tiene miedo a las tormentas, rayos y truenos. Algo curioso tomando en cuenta que vivió varios años en Inglaterra, donde las tormentas son algo habitual.
Madonna
También le teme a la muerte (tanatofobia), que es una fobia muy común. Al respecto ha dicho:
«El final de cualquier cosa implica la muerte: el final de una relación, de una carrera, de la vida física tal como la conocemos».
11. Johnny Depp: coulrofobia
A Johnny Depp, que ha sido catalogado como un actor muy versátil, padece de coulrofobia, que es el miedo irracional a los payasos. Ha intentado luchar contra su fobia interpretando papeles de personajes parecidos a los payasos, como lo hizo con el Sombrerero Loco en la película Alicia en el País de las Maravillas.
Johnny Depp
12. Carmen Electra: hidrofobia
A pesar de que saltó a la fama interpretando a un salvavidas en Los Vigilantes de la Playa (Baywatch), esta famosa actriz le tiene pánico al agua. Sin embargo, aclaró que este miedo solo surge frente a grandes cantidades de agua, como el mar.
Carmen Electra
13. Matthew McConaughey: Miedo a las puertas giratorias
El ganador del Oscar
sufre de claustrofobia, pero más específicamente a quedar atrapado en una
puerta giratoria, que son comunes en los hoteles. Por ello siempre busca
puertas normales por las que pueda entrar o salir de los lugares que frecuenta.
En una entrevista confesó:
Matthew McConaughey
«No me gustan las puertas giratorias ni tampoco ese punto ciego cuando conduces dentro de un túnel».
14. Adele: ornitofobia
Adele, con la mayor cantidad de discos vendidos en este siglo, sufre de ornitofobia (aversión a las aves). Pero no le teme a todas, sino a las gaviotas específicamente. Esta fobia se generó después de que uno de estos animales la atacara con fuerza y le dejara una cicatriz en el hombro.
Adele
15. Pamela Anderson: catoptrofobia
Pamela Anderson sufre de catoptrofobia, que es la aversión a los espejos. No tolera verse reflejada en uno, por esa trata de mantenerse lo más alejada posible de estos objetos tan comunes.
Pamela Anderson
16. Brad Pitt: selacofobia
El actor estadounidense tiene selacofobia, que es el miedo irracional a los tiburones. Su expareja Angelina Jolie reveló hace un tiempo que Pitt no puede soportar la idea de ver a sus hijos en el mar, porque teme que sean atacados por estos animales.
Brad Pitt
17. Rihanna: ictiofobia
A Rihanna la conocen como «la princesa de Barbados». Es muy extraño que viniendo de una isla no soporte los peces, pero efectivamente sufre de ictiofobia (temor a los peces).
Rihanna
Ella confesó que una vez tuvo que ser sacada del agua porque sufrió un ataque de pánico:
«Le tengo mucho miedo a las criaturas del mar. Incluso un pequeño pez».
18. Scarlett Johansson: entomofobia
La actriz americana sufre de dos fobias muy específica: blatofobia (miedo a las cucarachas) y ornitofobia (miedo a las aves).
Scarlett Johansson
Ella contó que un día se despertó con uno de estos insectos en la cara y desarrolló un miedo irracional:
«He intentado tocar cucarachas para superar mi fobia, pero me resulta imposible. Me dan miedo desde un día que me desperté con una en mi pie y otra en mi cara».
Y en la película Un
lugar para soñar tuvo que acercarse a su otro miedo: las aves. En esa ocasión
dijo:
«Tengo miedo a las aves. Algo acerca de sus alas, picos y aleteos. Me horrorizan. Sin me hubieran pedido que pusiera un pájaro en mi hombro lo hubiera hecho, pero hubiera sido muy difícil. Estaba aterrorizada con los pavos reales en el set».
19. Alfred Hitchcock: ovofobia
Alfred Hitchcock es considerado como uno de los grandes exponentes del cine. Con el suspenso que imprimía en cada película, es extraño pensar que sufría de ovofobia (miedo a los huevos).
Alfred Hitchcock
En una entrevista afirmó:
«Tengo miedo a los huevos, es algo peor que miedo, me repugnan. Esa cosa redonda y blanca sin agujeros… ¿Alguna vez has visto algo más repugnante que una yema de huevo rompiéndose y derramando su líquido amarillo?».
20. Khloé Kardashian: omfalofobia
La más joven de las hermanas Kardashian sufre de omfalofobia, una fobia rara que se caracteriza or la aversión a los ombligos.
Khloé Kardashian
Ella manifestó que para poder tomar una ducha debe usar guantes, pues no soporta tocar su propio ombligo:
«Grito cada vez que me lavo el ombligo».
Cómo se diagnostican las fobias raras
En algunos casos los pacientes manifiestan síntomas
y signos claros, lo que hace que no sea necesario realizar más pruebas
diagnósticas. Pero la mayoría de las personas no están conscientes del tipo de
fobia que sufren o qué las desencadena, por eso los profesionales aplican
entrevistas diagnósticas. Si se sospecha de una causa orgánica se requieren
otras pruebas, pero no es la regla.
La entrevista consta de varios pasos. El primero es identificar la ansiedad, en la que se le formularán las siguientes preguntas al paciente:
¿Cómo le están yendo las cosas últimamente?
¿Considera usted que está teniendo algún problema de estrés,
preocupaciones o ansiedad excesivos?
Si las respuestas son afirmativas, se procede a
indagar más a fondo:
¿Qué clase de cosas le preocupan?
¿Experimenta en alguna ocasión de forma repentina síntomas o sensaciones
físicas desagradables tales como palpitaciones o vértigos? ¿Tiene sensaciones
de miedo o pánico en esas ocasiones?
Si se identifica un problema, hay que continuar
explorándolo:
¿Este problema le molesta mucho?
¿Este problema interfiere con su trabajo, actividades o relaciones?
Las terapias, como hemos mencionado, van a depender del paciente y su trastorno. Las más utilizadas son: terapia de exposición, terapia cognitiva conductual, terapia del comportamiento cognoscitiva, desensibilización, Programación Neurolingüística (PNL) y medicación. El cerebro humano es impresionante. La capacidad de desarrollar miedos a prácticamente cualquier cosa que logre percibir, es lo que da vida a las fobias raras. Hay unas que pasan desapercibidas y no afectan la calidad de vida de una persona (como la papafobia), pero algunas de las fobias más raras traen consigo efectos negativos que deben tratarse con terapia. Cuando se trata de fobias, todo es posible. Algunas resultan comprensibles y otras sencillamente graciosas.
El hacking está considerado como una ocupación que desafía los cánones éticos de la sociedad. Ahora empiezan a ganar fuerza los conocidos como “hackers éticos”, encargados no solo de proteger la información de las empresas, sino de luchar por los derechos generales, ayudando a diferentes causas a favor del bien común. ¿Quieres saber cómo ser un hacker desde cero? Empecemos por el principio:
El mejor creador de videojuegos gratuito, Unity: Tu propio juego desde cero y sin conocimientos previos
➥ Leer artículo
Se estima que los empleos para los hackers o expertos en ciberseguridad se incrementen en un 37% en todo el mundo en los próximos años. Se trata de una de las profesiones con mayor proyección de futuro y, además, está bastante bien remunerada. El salario medio anual de un hacker ético en España oscila entre los 35.500€ y los 66.500€ .
En esta guía de hacking para dummies –o de iniciación al hacking– encontrarás consejos, documentación, cursos de hacking ético, webs especializadas en trucos de hacker, canales de Youtube y libros para aprender a hackear desde cero. Y como bonus, te damos un listado de los hackers más famosos del mundo, para que te sirvan de guía e inspiración…
¿Qué hay que estudiar para ser un hacker desde cero? Es conveniente contar con una serie de conocimientos previos y realizar cursos que permitan obtener una certificación. Además, es imprescindible practicar mucho y estar al día de los frecuentes cambios que se producen en los sistemas y en su seguridad.
Afortunadamente, en internet hay mucha información gratuita y de gran ayuda, pero lo normal es que, ante tantos recursos y formatos (eBooks, blogs, foros, sitios de práctica, canales de YouTube, etc.), surja la duda: ¿Cómo empezar en el hacking sin perderse entre tanta cantidad de datos? La respuesta es simple: asegúrate de formarte y sacar información en fuentes conocidas y fidedignas.
En este artículo te desvelamos contenidos, documentación y sitios fiables que te ayudarán a empezar y a aprender trucos hacker paso a paso de forma totalmente segura y fiable.
Pero para saber cómo empezar a ser hacker, lo primero es lo primero: tienes que dominar HTML, así como los diferentes lenguajes de programación, y entender de sistemas operativos…
El primer paso es descargar un sistema operativo igual o similar a UNIX. El propósito del uso de estos sistemas operativos es comprender el funcionamiento de internet desde un sistema de código abierto y sin limitaciones.
DragonFly CMS
También están los sistemas BSD, entre los que se encuentran NetBSD, OpenBSD, DragonFly BSD y FreeBSD. También tienes Darwin para operar en MacOS. Estas alternativas son las más conocidas y usadas en la iniciación al hacking, aunque también existen otros como Openindiana, del proyecto de sistema operativo Solaris.
En caso de optar por Linux, surge la dificultad de escoger la mejor opción entre una gran cantidad de sistemas operativos o distribuciones del mercado. Empieza por formarte en BackTrack Linux y Backbox Linux. El hacking básico parte de un conocimiento medio o avanzado de estas distribuciones.
Escribir en código HTML
Empezar a hackear, como con cualquier proyecto de aprendizaje, debe hacerse practicando con tareas básicas. Dominar el código HTML es fundamental para aprender hacking básico, y lo más aconsejable para familiarizarse con él es desarrollar una página web o una aplicación, escribiéndola en código HTML.
Para ello, se puede comenzar analizando el código fuente de algunas páginas de referencia, escribiendo códigos propios de prueba y visualizándolos en el navegador para comprobar su funcionamiento. En este punto no hay duda, para aprender hacking desde cero hay que tener, sí o sí, conocimientos básicos de html.
Cualquier persona que quiera saber cómo ser hacker debe dominar algunos lenguajes de programación esenciales. Los que más emplean los hackers profesionales son Java (dirigido a hackers con más experiencia), JavaScript y Python, muy parecidos entre sí en prestaciones y en facilidad de uso.
Para aprender con un lenguaje orientado especialmente a UNIX, lo más recomendable para quién esté buscando cómo ser un hacker informático es el PHP. Aprender PHP hará más fácil el dominio del lenguaje C, uno de los más eficientes.
Características y cualidades de un buen hacker
Entre las cualidades personales que debe de tener un hacker de éxito está la curiosidad. Ningún hacker se conforma con entender un problema de vulnerabilidad de un sistema o de una red y solucionarlo. Tiene que estar dispuesto a ir más allá, a pensar fuera de la caja y prever futuros ataques y prevenirlos.
La pasión es otro punto importante, pues da igual cuánto le lleve a un hacker repeler un ataque de fuerza bruta o cualquier otra brecha en el sistema. Los objetivos y las metas altas, como aprender a ser un hacker reconocido, es lo que hará más placentero el esfuerzo.
Cómo ser hacker desde cero: Imagen: Surface.
La capacidad de mantener un estudio constante es también esencial. No importa cuánto talento tenga un aspirante a hacker para aprender los diferentes lenguajes de programación. Si no practica ni actualiza conocimientos, no llegará a destacar.
Otras aptitudes que ayudan mucho a cualquier persona a convertirse en hacker profesional son la creatividad, la proactividad para resolver problemas y ser competente.
Los buenos hackers suelen escribir programas de código abierto que resuelvan problemas concretos y que puedan ser usados y mejorados por otros hackers. Este tipo de acciones les permiten relacionarse con otras figuras activas y son un trampolín para el reconocimiento dentro del sector.
Por eso, además de las aptitudes y la predisposición, el primer punto del manual del hacker es contar con buenos, variados y actualizados conocimientos que permitan actuar rápidamente en cualquier situación de riesgo. Si quieres saber qué estudiar para ser hacker desde cero, aquí te dejamos dos cursos con los que podrás escribir los primeros códigos de tu futuro camino virtual.
Cursos de hacking para principiantes
Cómo hacerse hacker puede parecer más complicado de lo que realmente es. En internet existe formación tanto para aquellos que buscan cómo aprender a ser un hacker profesional, como para los que solo quieren obtener las nociones básicas sin profundizar en exceso.
Estos últimos pueden hacer un curso de hacker gratis desde cero y aprender accediendo a información libre ofrecida por otros hackers en sus blogs, canales y foros (algunos de los cuales mencionamos más adelante).
Para los que buscan cómo aprender a hackear desde cero y formarse de forma práctica con profesores especializados, a continuación detallamos dos cursos de iniciación al hacking ético que resultan ser el punto de partida idóneo para iniciarse como especialista en seguridad informática.
Curso Completo de Hacking Ético
¿Cómo aprender a ser hacker? El Curso Completo de Hacking Ético tiene como propósitoformar hackers desde cero para que logren hallar vulnerabilidades en las empresas, tratando temas como la seguridad y hacking ético sobre sistemas, aplicaciones web, redes, tecnologías Wireless y ejercicios Red Team entre otros.
Es un curso de hacker ‘en vivo’, es decir, que cada mes se suben nuevos vídeos y clases, lo que aumenta el nivel de formación progresivamente. Además cuenta con certificado de finalización.
¿Qué se aprende en este curso?
Con este curso se aprenden los conocimientos necesarios para afrontar la realización de auditorías de seguridad o hacking ético sobre las principales tecnologías, sistemas y entornos.
También enseña a aplicar los conocimientos aprendidos de forma defensiva con el objetivo de asegurar una infraestructura de posibles atacantes.
¿A quién va dirigido?
Es el curso indicado para personas que deseen adentrarse en el hacking ético y aprender seguridad informática desde cero hasta las técnicas más avanzadas de seguridad.
Temario
Introducción al curso
Introducción al Hacking Ético
Despliegue del laboratorio de pruebas
Manejo de Kali Linux
Anonimato en Internet
Identificación y explotación de vulnerabilidades en sistemas
Identificación y explotación de vulnerabilidades en aplicaciones web
Identificación y explotación de vulnerabilidades en redes
Identificación y explotación de vulnerabilidades en redes Wi-Fi
Ingeniería Social
Pautas para la ejecución de ejercicios Red Team
Futuros módulos
Casos reales de ejercicios de Red Team
Hacking ético aplicaciones móviles
Técnicas para la denegaciones de servicio
Técnicas para la elevación de privilegios en Windows
Técnicas para la elevación de privilegios en Linux
Creación y desarrollo de exploits
Automatización de acciones con Powershell
Automatización de acciones con Python
Desarrollo de proyectos avanzados
Certificación: Certificado de finalización. Requisitos: No es necesario disponer de conocimientos previos, pero sí es deseable tener un conocimiento básico en sistemas operativos, redes y programación. Duración: 25,5 horas de vídeo bajo demanda. Horario: Flexible. Precio:159,99€ 40€ (oferta limitada).
¿Dónde estudiarlo?
Es un curso online, accesible desde la plataforma eLearning de Udemy.
Curso Hacking Ético: Footprinting y Reconocimiento
Descripción
El Curso Hacking Ético: Footprinting y Reconocimiento es una de las formaciones que componen la serie de Hacking Ético que ofrece Tutellus y también forma parte de la carrera de Ciberseguridad Informática. En él se ofrecen técnicas específicas para proteger a las empresas de los ataques de recopilación de información.
¿Qué se aprende en este curso?
Abarcando desde un nivel muy básico, enseña cómo se realiza la recopilación de información, como táctica para probar la seguridad de una empresa. También ofrecen prácticas de contramedidas para resguardar información crítica.
¿A quién va dirigido?
Para personas que deseen incursionar en el
hacking ético, desenvolviéndose específicamente en Footprinting y
Reconocimiento en empresas, o incluso como consultores independientes.
Temario
CONFIGURAR EL LABORATORIO DE PRÁCTICAS ● Laboratorio de Prácticas con Vmware Player ● Laboratorio de Prácticas con VirtualBox
RECOPILAR INFORMACIÓN ● Introducción al Footprinting ● Tipos y Objetivos del Footprinting ● Herramientas de Footprinting
BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN ● Búsqueda de Información ● Búsqueda de Información en Buscadores ● Sitios Web ● Herramientas para Sitios Web ● Información de Red ● Información DNS
OTRAS FUENTES DE INFORMACIÓN ● Otras Fuentes de Información ● Sitios Web de Empleo ● Netcraft ● The Wayback Machine ● Búsqueda de Personas
OTRAS TÉCNICAS PARA RECOPILAR INFORMACIÓN ● Otras Técnicas para Recopilar Información ● Redes Sociales ● Ejemplo de Búsqueda en Redes Sociales ● Maltego ● Correo Electrónico
GOOGLE HACKING ● Google Hacking ● Cómo Funciona Google ● Operadores Avanzados ● Google Hacking Database
CONTRAMEDIDAS ● Contramedidas ● Contramedidas Frente a Footprinting y Reconnaisance ● Pentesting de Reconocimiento
Certificación: Certificado de finalización. Requisitos: Acceso a internet y ordenador con 4 GB de RAM, con virtualización hardware (Inter-VT EPT ó AMD-V), y con procesador de 64 bits. Mínimo de 40 GB de espacio en disco duro. Duración: 4 horas. Horario: Flexible. Precio: 20€, gratis a través de suscripción.
¿Dónde estudiarlo?
Curso online, accesible desde la plataforma eLearning de Tutellus.
A continuación detallamos algunos de los mejores libros para aprender a hackear desde 0.
Hacker’s WhiteBook: Guía practica para convertirte en hacker profesional desde cero
Este libro, de Pablo Gutiérrez Salazar, está redactado como una guía práctica divida en 9 capítulos donde enseña la metodología completa, fundamentos y técnicas más modernas para convertirse en un hacker profesional capaz de hackear páginas web, teléfonos móviles, PCs, servidores, sistemas, redes sociales, redes wifi…
Hacking Ético 101 – Cómo hackear profesionalmente en 21 días o menos!
También con un enfoque práctico, este conocido libro, de Karina Astudillo B., proporciona información paso a paso sobre la metodología que siguen los hacker éticos, las herramientas que suelen utilizar y cómo atacan los puntos vulnerables de los diferentes sistemas informáticos. Según afirma, dedicando tan solo 2 horas diarias conseguirás convertirte en hacker ético profesional, lo que lo convierte en un imprescindible para saber cómo aprender a hackear desde 0.
El libro del hacker
María Ángeles Caballero Velasco y Diego Cilleros Serrano son los autores de este libro en el que abordan desde los conceptos básicos de seguridad y técnicas de hacking, hasta conocimientos avanzados en ciberseguridad. También hacen un repaso de las técnicas de ataque más novedosas, los retos y riesgos de la identidad digital, sin dejar de lado la criptografía y firmas electrónicas, las técnicas de intrusión, el hacking web, y muchos otros conceptos esenciales para iniciarse en el mundo del hacking.
Hacking con buscadores: Google, Bing & Shodan + Robtex, de Enrique Rando
El Google Hacking es una de las técnicas de hacking más populares, sin embargo, pocos autores se han dedicado enseñar sus fundamentos. Este libro Enrique de Rando se pasea por las técnicas y herramientas más eficientes para llevar a cabo la minería de datos a través de los buscadores.
Hacking de Aplicaciones Web: SQL Injection, de Enrique Rando, Chema Alonso y Pablo González
Destacados autores del mundo del hacking, como Enrique Rando, Chema Alonso y Pablo González firman este libro donde enseñan cómo ser un hacker profesional centrándose en las técnicas SQL Injection, las descargas de ficheros y la optimización de ataques desde un enfoque didáctico y práctico.
Pentesting con FOCA, de Chema Alonso
FOCA es un proyecto de recolección de ficheros de websites que extrae los datos y los analiza. Este libro, escrito por importantes figuras del hacking en España, aporta las herramientas necesarias para un mayor aprovechamiento de FOCA. Entre los temas que cubre, enseña el tratamiento que se debe hacer a la información obtenida con FOCA según los esquemas de ataque a emplear en un Pentesting.
FOCA: Manual de Usuario, de Chema Alonso
Siguiendo con la herramienta FOCA, este es un manual elaborado por Chema Alonso que se encuentra disponible en su blog Un informático en el lado del mal. Este manual, dividido en cuatro partes, enseña desde cómo descargar ficheros de datos de websites, hasta cómo realizar un análisis cruzado de datos.
Chema Alonso, autor del blog «Un informático en el lado del mal».
Canales de YouTube para aprender hacking
Tan importante como son los libros para el aprendizaje, también lo son los canales de YouTube que, además de instruir, enseñan muchos trucos del mundo hacker de forma cercana y actualizada.
¿Dónde mejor que en Youtube para encontrar vídeos con tutoriales, técnicas, herramientas indispensables y trucos hacker para iniciarse en el sector…? A continuación te dejamos algunos de los mejores cursos y canales de Youtube para aprender hacking desde cero:
Cursos de Youtube para hacerse hacker ético desde cero:
Ver vídeos está muy bien y es muy instructivo, pero cuando se habla de códigos y de programación, las webs y blogs especializados se llevan toda la atención de los hackers más activos. Este listado incluye los mejores blogs sobre hacking:
Y como siempre surgen dudas, los foros son los lugares a los que acudir para solucionarlas y contactar con gente afín con la que poder intercambiar impresiones y colaborar. Este es el listado con las mejores comunidades donde cualquier aspirante a hacker puede aprender de los profesionales que comparten sus conocimientos.
La mejor manera de poner a prueba los conocimientos que se van obteniendo es a través de la práctica. Para ello, existen una gran variedad de sitios web especialmente diseñados como bancos de pruebas ideales para los que buscan cómo convertirse en hacker. Estos son los principales:
Smash the Stack Wargaming Network
Smash the Stack es un sitio bastante lúdico que ofrece distintos juegos de guerra cibernética en diversos niveles para poner a prueba los conocimientos de cualquier aspirante a hacker. Los retos son sobre soluciones de ciberseguridad como Blowfish, CTF logic, Tux, Amateria, Apfel y Blackbox.
Hellbound Hackers
Hellbound Hackers es una de las páginas más completas en cuanto a documentación de ciberseguridad y tests para detectar vulnerabilidades en sitios web. En ella, los aspirantes a hacker pueden encontrar soluciones ante ciberataques.
Root Me
Creando un usuario en Root Me es posible tener acceso a todos los retos disponibles para mejorar las habilidades en hacking. Otra de sus funciones más interesantes son los torneos CTF (Capture the Flag), en los que se puede participar –en equipo o en solitario–, en competiciones para mejorar las habilidades.
Hacking-Lab
Para cualquiera que ande buscando un sitio de pruebas con desafíos cibernéticos europeos, tiene que apuntarse a Hacking-Lab. Con un simple registro, cualquiera podrá enfrentarse a los hackers más expertos en los retos que ofrece la plataforma.
W3challs
W3challs es otro de los sitios de retos de hacking más completos que existen, cubriendo categorías como cracking, hacking, juegos de guerra, forense, esteganografía, criptografía y programación. Estos retos no son juegos de simulación, sino desafíos reales que proporcionan puntos en función de la dificultad de cada uno.
Enigma Group
Enigma Group es uno de los sitios de hacking con la mayor comunidad de usuarios registrados. Tiene más de 300 desafíos de ciberseguridad, enfocados en las top 10 vulnerabilidades de OWASP (Open Web Application Security Project).
Hack.me
Hack.me presenta una gran colección de aplicaciones web con vulnerabilidades con las que los hackers tendrán que poner a prueba sus habilidades en seguridad perimetral. Dichas aplicaciones las aportan los mismos usuarios que forman la comunidad.
Los hackers éticos más famosos del mundo
Qué estudiar para ser hacker incluye conocer a las figuras de referencia en el ámbito. Estos son algunos de los hackers éticos más famosos del mundo:
Kevin Mitnick
Kevin Mitnick, considerado el hacker más famoso del mundo
Actual consultor y creador de sistemas de seguridad para empresas estadounidenses, Kevin fue conocido como el hacker más famoso del mundo a mediados de los noventa por acceder al Pentágono y al NORAD. Él ha declarado que hackeaba por diversión y no por conseguir dinero ni fama.
Tsutomu Shimomura
Tsutomu Shimomura.
Shimomura es un físico japonés que ha dedicado parte de su tiempo a la seguridad informática. Ha cumplido funciones de consultoría con el FBI y agencias dedicadas a perseguir la delincuencia informática.
En los 90 Shimomura fue pieza clave en la captura de Kevin Mitnick. Dicha proeza le ha llevado a ser considerado el mejor hacker del mundo.
Richard Stallman
Richard Stallman
Richard Stallmam es un informático y programador estadounidense. Hasta 2019, era fundador de la Free Software Foundation y científico y profesor visitante del MIT.
Stallmam es conocido principalmente por su activismo alrededor del software libre, un modelo de distribución y desarrollo distinto al modelo del software privado y que ofrece mayores posibilidades a los usuarios.
Joanna Rutkowska
Joanna Rutkowska.
Joanna es una experta en informática nacida en Polonia. Es fundadora y directora jefe de Invisible Things Lab, una organización orientada a la investigación alrededor de la seguridad informática.
Entre el grupo de hackers más famosos del mundo, ella es conocida por su investigación en las tecnologías usadas por malware. En 2006, Joanna introdujo un hardware virtual completamente indetectable en una copia de Windows Vista, demostrando la debilidad del sistema ante la tecnología de virtualización.
Anonymous
Integrante de Anonymous, la organización de hackers éticos, en una protesta en EE.UU.
No es una persona, sino un grupo de hackers que actúan bajo este seudónimo. Se le considera un movimiento descentralizado que actúa a favor de la justicia social y la transparencia de la información. Este grupo es sin duda una referencia para los interesados en cómo empezar a hackear de forma ética.
Recientemente, un hacker o grupo de hackers bajo el seudónimo de Anonymus liberó información que incrimina a Donald Trump con casos de pedofilia, violación y asalto sexual.
Si has llegado a este punto y aún te preguntas cómo ser hacker desde cero es más que probable que te hayas saltado medio artículo. Como hemos visto, existen gran cantidad de libros de hacking, blogs con trucos hackers y te hemos detallado más de un curso de hacker para que tengas muy claro cómo empezar a hackear. No tienes más que empezar por el principio, ponerle ganas y antes de que te des cuenta estarás hablando de phishing, puertas traseras y te habrás convertido –esperemos– en un white hacker o hacker ético en pro del bien común.
A pesar de que las casas ecológicas no son el tipo de
estructura predominante en la actualidad, cada vez son más las ciudades que
apuestan por construir viviendas ecológicas y sostenibles.
Arquitectura ecológica sostenible: Fundamentos, beneficios, materiales, arquitectos y proyectos famosos
Esto implica, en muchas ocasiones, la utilización de recursos
reciclados o inagotables como base de las construcciones, pero también, la
implementación de la tecnología necesaria para reducir la huella de carbono que
se emite al habitar un hogar tradicional.
Sigue leyendo para descubrir cómo son las casas ecológicas, qué tipos existen y cuáles son las 20
casas ecológicas más originales a día de hoy…
Se trata de viviendas que cuentan con un consumo energético mínimo. No todos los materiales pueden ser utilizados para este tipo de construcciones.
Debe tratarse de recursos sostenibles cuya fabricación no genera gran impacto negativo sobre el ambiente. Por lo general, son recursos naturales.
Es importante también
que el diseño sea bioclimático. Es decir, que optimice el uso de los recursos que se proveen
por la naturaleza.
Tipos de casas ecológicas
Casas ecológicas de madera
Casa ecológica de madera
Este tipo de casas se consideran como construcciones
ecológicas porque es hecha a base de un material natural, que no contiene
químicos ni tóxicos que puedan afectar el entorno o la salud de quienes allí
hacen vida. Por lo tanto, se trata de casas que respetan el medio ambiente.
Además, no deja huella ecológica.
Por sus características, la
madera aporta resistencia al hogar y, además, cuenta con acabados de
calidad.
Ventajas y desventajas de la madera
Utilizar madera como material base para la construcción de un hogar puede ser muy ventajoso.
En primer lugar, las propiedades que posee permiten que se mantenga la humedad en 50% dentro en el interior. Esto es así siempre que no se utilicen barnices sobre el material.
La capacidad aislante
del material también resulta beneficiosa. Protege a las personas que se encuentran en el
interior, de la temperatura exterior. Pero solo logra hacerlo hasta cierto
punto, por lo que se recomienda agregar a su vez aislante térmico.
Un par de cholas, raquetas y una pelota en un suelo de madera
Tipos de madera para la construcción de casas ecológicas
Contar con una vivienda ecológica de madera permite vivir
rodeado de un material que regula la humedad en el interior, aporta calidez y
resulta agradable caminar sobre él. Sin embargo, también cuenta con sus
debilidades
Una de las principales desventajas es que puede ser más vulnerable frente a incendios, por lo que se recomienda conocer con antelación la forma en la que el tipo de madera utilizado reacciona frente al fuego.
Sin embargo, las normas exigidas para estas construcciones son tan precisas, que no es común que ocurran incendios producto de fallas eléctricas dentro del hogar.
Madera maciza
Casa de madera maciza
Es el método tradicional. Se trata de las construcciones para las cuales se apilan troncos de madera con forma circular que cuentan con hendiduras que permiten que encajen entre ellos.
Este tipo de construcciones suelen ser más costosas. Sin embargo, permiten disfrutar del material en toda su esencia. Aporta gran soporte, pero se debe construir con gran cuidado y precisión para evitar inestabilidades, en especial, en áreas de puertas o de ventanas.
Ballon frame o cerco ligero de madera
Casa de ballon frame
Es muy utilizado en Estados Unidos. Por lo tanto, está más regularizado para que sean estructuras ligeras y seguras. Para el revestimiento también se hace uso de elementos ligeros, para evitar que se agregue una carga o peso mayor del necesario.
Entramado de madera
Casa con entramado de madera
También se trata de construcciones ligeras. La estructura es creada al entramar conjuntos de montantes y travesaños. Los entramados son usados como marcos y luego se rellenan con la fachada.
Se pueden usar varios tipos de materiales para ese relleno, desde tableros de madera o placas de cartón, hasta ladrillos y barro.
Casas ecológicas de ladrillo
Casa ecológica de ladrillo
Los hogares hechos a base de ladrillo son muy comunes. Pero existen diversos tipos de ladrillos.
En el caso de las casas sostenibles ecológicas, el ladrillo de barro sin cocer es una buena opción. Al no requerir de gran uso de energía para su elaboración, tiene un impacto menor sobre el medio ambiente.
Ventajas y desventajas del ladrillo
Una de las principales ventajas es que es mucho más resistente que la madera frente al fuego. Esto se debe a que ni se quema ni sus propiedades propagan el fuego que se genere en el interior de la casa.
Interior de una casa fabricada con ladrillo
Sin embargo, no tiene propiedades de aislamiento. Por lo que es necesario colocar aislamiento térmico a la estructura. Durante este proceso es importante prestar gran atención a las esquinas para evitar que el aislamiento no cuente con continuidad.
Tipos de ladrillos para la construcción de casas ecológicas
Pared de piedra natural
Casa con pared de piedra natural
Este tipo de material otorga una apariencia rústica que resulta estéticamente agradable. Por ello, hay quienes buscan usar este material para sus hogares. Sin embargo, no siempre resulta ser una opción práctica.
En primer lugar, porque resultan ser construcciones muy costosas y porque las propiedades de este material no le otorgan un buen comportamiento térmico. Por lo que, si se quiere contar con este material, se recomienda colocarlo solo como revestimiento de fachada.
Muros de ladrillo calcáreo
Muro de ladrillo calcáreo
Esta opción puede resultar muy ventajosa. Este material no requiere de cocción, por lo que su producción es más respetuosa con el medio ambiente. Está compuesto por 8% de cal y 92% de arena.
Es importante agregar un sistema de aislamiento térmico, porque no es una propiedad característica de este material. Por otro lado, su superficie es muy lisa, lo que puede permitir que funcione sin necesidad de revestimiento.
Barro
Casa de barro
Se trata de un material muy abundante que puede ser encontrado en casi todo el mundo. Además, es respetuoso con el medio ambiente y no representa un riesgo para la salud humana.
Es también un material incombustible, por lo que no es tan vulnerable frente al fuego. Pero presenta un problema: no se trata de un material impermeable.
Estar expuesto a fuertes lluvias, o al agua de forma frecuente, podría afectar su resistencia y durabilidad.
Casas ecológicas de hormigón
Casa ecológica de hormigón
Este material está compuesto por cemento, áridos, aguas y algunos aditivos.
A pesar de que no es completamente ecológico, es una buena opción para la construcción de casas ecológicas, en especial, cuando se cuenta con un presupuesto ajustado y se buscan alternativas más económicas.
Ventajas y desventajas del hormigón
Este material presenta más desventajas que ventajas. A pesar de ser más económico que otros, no tiene buena capacidad térmica.
Por otro lado, su producción requiere de gran uso de energía y es necesario incluir barras de metal en la estructura de la construcción para que pueda ser estable.
Esto hace que su impacto en el medioambiente sea más fuerte y que tenga una huella ecológica importante.
Paneles de hormigón para la construcción de casas
Tipos de hormigón para la construcción de casas ecológicas
Fábrica de bloques de hormigón convencional
Casa fabricada con bloques de hormigón convencional
Su aplicación es muy común en cualquier tipo de estructura relacionada con construcciones.
Es fácil de fabricar y sus controles de calidad ya están bien definidos. Está presente tanto en grandes edificaciones como en construcciones civiles.
Fábrica de bloques de hormigón celular
Casa con bloques de hormigón celular
Este tipo de producción es mucho más ecológico que el de otros tipos de hormigón. Además, sus propiedades térmicas son mejores. Está compuesto principalmente por arena, cal, cemento y yeso.
Su desventaja es que no reacciona bien frente a la humedad. Por lo que es necesario aplicar un revestimiento que proteja al material frente a la humedad.
Casas ecológicas de corcho
Refugio ecológico construido con corcho
Este
material se está empezando a usar tanto en rehabilitaciones de viviendas, como
en nuevas construcciones. Reduce en gran medida las emisiones de carbono
asociadas con la industria de la construcción por lo que resulta atractivo para
la creación de casas autosustentables.
El corcho es capaz de regenerarse. Por lo que no es necesario talar por completo
el alcornoque, el árbol de cuya corteza se obtiene el corcho.
Ventajas y desventajas del corcho
Además de tratarse de un recurso sostenible, el corcho también cuenta con buenas propiedades aislantes. Por lo que permite mantener una temperatura agradable en el interior.
Es resistente a la humedad y no suele atraer plagas -como roedores- que realicen daño al material o a las estructuras creadas con él en el hogar.
Interior de una casa de corcho
A su vez, se trata de un material bastante delicado, por lo que podría sufrir daños con facilidad. Por ejemplo, con solo mover algunos muebles. Esto representa una desventaja para algunas personas. Por otro lado, no debería colocarse en sitios que están constantemente expuestos a la luz solar y requieren de mantenimiento constante.
Tipos de corcho para la construcción de casas ecológicas
Aislantes de corcho
Pueden ser observados en algunas construcciones. En especial, en el interior del hogar para garantizar que se mantiene una temperatura agradable.
Dormitorio con panel de corcho en el cabecero de la cama
Pero además de funcionar como aislante térmico, también es capaz de servir como aislante acústico. Por lo que también bloquea sonidos propios de las calles o del tráfico en zonas cercanas.
Suelos de corcho
Uno de los atractivos de estos suelos es la sensación que se obtiene al caminar sobre ellos. Se pueden conseguir en láminas, en placas o en losetas.
Salón de una vivienda con el piso de corcho
Se considera que su elasticidad resulta beneficiosa para las articulaciones, y la columna. Por lo que se recomienda instalarlo en gimnasios, habitaciones para niños o para embarazadas.
Casas ecológicas con bambú
Este tipo de viviendas en el mundo son muy resistentes. Se debe a que el bambú tiene una resistencia similar a la del hormigón y una capacidad de tracción que se asemeja a la del acero, por lo que puede incluso resistir terremotos.
Casa ecológica de bambú
Lo más llamativo es que cada año nacen nuevos brotes de esta planta. Por lo que se trata de un material sostenible.
Ventajas y desventajas del bambú
Son múltiples las ventajas de este material. En primer lugar, se trata de un recurso sostenible en el tiempo. Además, es muy flexible y liviano.
Pero también es resistente en gran medida. Lo que agrega soporte a las construcciones que se realicen con bambú.
Estructura exterior de una casa de bambú
Sin embargo, presenta desventajas sobre las que se tiene que trabajar. En primer lugar, es que atrae a plagas que pueden acabar con el bambú con rapidez.
Por otro lado, si no se protege de forma adecuada, se carcome y termina envejeciéndose.
Tipos de bambú para la construcción de casas ecológicas
Tableros
Es el formato más común en el que se encuentra el bambú para constructores. De esta manera, cualquier persona acostumbrada a trabajar con materiales de madera puede trabajar el bambú sin problema alguno.
Terraza techada con tableros de bambú
Se trabaja de forma normal. La diferencia es que aporta mayor resistencia y flexibilidad.
Parquets y tarimas
Realizar este tipo de material haciendo uso del bambú es algo nuevo. Pero representa gran ventaja. Al ser un material tan resistente, funciona muy bien para colocar en el suelo.
Salón minimalista con el suelo de parquet en forma de baldosa
A pesar de ser una metodología nueva, su demanda continúa en aumento. En primer lugar, por su utilidad, pero también por su sostenibilidad.
Casas ecológicas con acero reciclado
Si lo que se busca es contar con eco casas, no se recomienda el uso de metales o de acero. Los procesos requeridos para su fabricación suelen ser bastante dañinos.
Casa ecológica construida con acero reciclado
Sin embargo, hay gran cantidad de metal que es fusionado y reciclado. Algunos de ellos podrían ser utilizados en la construcción de casas autosostenibles, a pesar de no ser 100% respetuoso con el ambiente.
Ventajas y desventajas del metal reciclado
No es común observar hogares hechos con estos materiales. Sin embargo, algunos arquitectos lo han empezado a utilizar en proyectos que buscan impulsar la sostenibilidad en la industria.
Casa construida en un contenedor de metal
Como está aún en una fase inicial, no es tan fácil ver este tipo de casas del mundo y sus acabados aún no son perfectos.
De realizar los proyectos adecuadamente, se le puede dar una segunda vida útil incluso a antiguos contenedores y reducir los costes de fabricación de nuevos hogares.
Tipos de metal reciclado para la construcción de casas ecológicas
Metal corrugado reciclado
Se trata de paneles ondulados que son funcionales y muy económicos. Sin embargo, su uso es exclusivo para la cobertura de instalaciones como granjas o industrias.
Casa de metal corrugado reciclado
Puede ser nuevo o reciclado, pero en el caso de las casas ecológicas autosuficientes, lo ideal es que sean reciclados.
Entre sus ventajas se encuentra que es resistente, de larga duración y muy fácil de transportar.
Contenedores reciclados
A
pesar de que no se ha realizado con frecuencia, existen proyectos aislados
alrededor del mundo que se han enfocado
en dar una segunda vida a contenedores de acero y lo han conseguido con
éxito.
Casa fabricada con contenedores reciclados
Hubo un caso dentro de España: una casa en el Tiemblo, Ávila. A pesar de que la apariencia externa se mantuvo casi intacta, se hicieron reformas en el interior para garantizar que la construcción, hecha a partir de antiguos contenedores, pudiera ser habitable.
Casas ecológicas con fardos de paja
También conocidas como balas de paja. Se trata de una técnica que apareció en Estados Unidos durante el siglo XIX y que hoy es una de las más utilizadas para realizar casas sostenibles baratas.
Casa ecológica hecha con fardos de paja
En ese momento, fue utilizado como un material temporal. Pero sus propiedades otorgaban ventajas que permitió que muchos adoptaran este material como parte base de la estructura de sus hogares.
Además de ser económico, sus características físicas son
adecuadas para mantener diferentes tipos de casas en pie. A pesar de que los
fardos de paja son el recurso principal para la construcción, también se
emplean cimientos, vigas y techo.
Ventajas y desventajas de los fardos de paja
En primer lugar, el material funciona muy bien como aislante térmico, por lo que la temperatura interna de la construcción se mantiene agradable y protegida hasta cierta medida del clima externo.
Grupo de personas construyendo una casa con fardos de paja
También
funciona como aislante acústico. Como resultado, el ambiente se mantiene
calmado y pacífico en el interior.
Tipos de construcciones con fardos de paja
Autoportantes o estilo Nebraska
Es la estructura tradicional, más antigua y más sencilla de aplicar.
Casa de estilo Nebraska
Los propios muros de la vivienda son rellenados con fardos de paja. Lo hacen para que soporte el peso de la fachada.
Portante
Es una estructura más compleja y de gran utilidad al construir casa ecológica que posea más de una planta.
Casa portante de dos plantas que se está construyendo con paja y cemento
Debido a su complejidad, es necesario que sea un profesional quien se encargue de su construcción.
Puede utilizar madera, hormigón, cemento o concreto para soportar el techo, y las segundas o terceras plantas. Los fardos son utilizados para consolidar los muros y se colocan entre pilares.
Matriz con mortero
Los fardos son estructurados con un mortero, por lo que se trabajan como si se tratara de ladrillos. Se colocan en columnas y se adhieren con cementos para formar especies de pilares.
Casa de paja construida mediante el método de matriz con mortero
Este método no es tan popular y su uso, por tanto, no es muy frecuente. Se utiliza principalmente en Canadá.
Las 20 casas ecológicas más originales
1. Eco Arch. Kent, Inglaterra
Se trata de una de las pocas casas redondas ecológicas en el mundo.
Casa ecológica «Eco Arch». Kent, Inglaterra
Formada por azulejos de arcilla, cuenta también con tierra y grava, para que se puedan sembrar especies de flores en ella.
2. The Active House. Lystrup, Dinamarca
Una construcción que busca disminuir a cero las emisiones de carbono, sin renunciar a la comodidad y funcionalidad.
Casa ecoógica «The Active House». Lystrup, Dinamarca
3. Livinghomes RKI. Santa Monica, Estados Unidos
Esta casa autosostenible fue construida en el 2006.
Interior de la casa ecológica «Livinghomes RKI». Santa Monica, Estados Unidos
No utiliza energía, ni agua, ni emite emisiones de carbono. Todo gracias a su impresionante tecnología.
4. Flow House Design Concept. Nueva Orleans, Estados Unidos
Diseñada para la zona afectada por el huracán Katrina. Está compuesta enteramente por elementos sostenibles.
Casa ecológica «Flow House Design Concept». Nueva Orleans, Estados Unidos
Su concepto implica que cuando ya no se encuentre habitada, los recursos utilizados pueden ser reciclados o regresados a la naturaleza.
5. Brooks Avenue House. Venice, Estados Unidos
Está compuesta por materiales naturales que se entrelazan con una tecnología que permite que se gaste la cantidad mínima de energía requerida. Cuenta con un jardín vertical en el techo.
Casa ecológica «Brooks Avenue House». Venice, Estados Unidos
6. Residencia entre árboles. Sydney, Australia
Se basa en el concepto de casa de árbol y se sitúa justo en medio de la naturaleza, atravesada por un ejemplar de eucalipto.
La residencia entre árboles. Sydney, Australia
7. Hof Country Residence. Skakafjordur, Islandia
Diseñada por Studio Granada, encuentra la armonía entre los espacios modernos del interior y el entorno rústico que la rodea. Utiliza cemento, roble y acero.
Casa ecológica «Hof Country Residence». Skakafjordur, Islandia
8. The Woodman´s Cottage. Sussex, Inglaterra
Hace uso de recursos locales y de madera. A pesar de que el acabado es un poco rústico, ofrece una buena armonía con el entorno natural que rodea a la construcción.
Casa ecológica «The Woodman´s Cottage». Sussex, Inglaterra
9. Villa UH1. Nacka, Suecia
El diseño se inspira en los bunkers alemanes de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial. Una estructura aislada y estable construida al pie de una colina.
La «Villa UH1». Nacka, Suecia
10. Shelter House. Yport, Francia
Utiliza paneles solares para generar su propia energía eléctrica, calefacción y agua. Todos los recursos utilizados para su construcción fueron encontrados en la zona y son reciclables.
Casa ecológica «Shelter House». Yport, Francia
11. East Sussex House. Reino Unido
Rodeada de terrenos y jardines, incluye sistemas tecnológicos que permiten regular mucho mejor el consumo energético que se realiza.
Casa ecológica «East Sussex House». Reino Unido
12. The Pavilion. Blackheath, Londres
Está construida en un entorno natural. Deja una huella ambiental mínima y ofrece comodidad, modernidad y un diseño de interiores impecable.
Casa ecológica «The Pavilion»
13. Stacking Green. Ho Chi Minh, Vietnam
fue construida en el 2012. Se utilizaron solo materiales locales para completarla. Ahorra energía al permitir la ventilación natural.
Casa ecológica «Stacking Green». Ho Chi Minh, Vietnam
14. Djuric Tardio. París, Francia
Fue construida usando madera de alerce finlandés. Se buscaba crear una vivienda funcional sin usar demasiados artefactos.
Casa ecológica «Djuric Tardio». París, Francia
Está distribuida de tal forma que pueda aprovechar al máximo la luz solar.
15. Casas Soletas. Rumanía
Se trata de un conjunto de casas construidas para que funcionen de forma sostenible. Se construyeron más de 40 ejemplares.
Casas Soletas. Romania
Hacen uso de tecnología que les permite generar energía a través de la luz solar, del viento y del agua.
16. Proyecto Studio a77. Buenos Aires, Argentina
Esta construcción se realizó utilizando la menor cantidad de recursos económicos posibles. Una de los requisitos fue que su estructura se realizara con materiales reciclados.
Proyecto Studio a77. Buenos Aires, Argentina
17. Caterpillar House. Laderas de Los Andes, Chile
Completada en 2012 por Sebastián Irarrázaval. Para su construcción, utilizó 12 contenedores reciclados.
Casa ecológica «Caterpillar House». Laderas de Los Andes, Chile
18. The Curved House. Springfield, Estados Unidos
Cuenta con un concepto sostenible desde diferentes aspectos. Posee energía solar, sistemas eco termales y calefacción que proviene del suelo.
Casa ecológica «The Curved House». Springfield, Estados Unidos
19. Method West Seattle Townhomes. Washington, Estados Unidos
Una serie de casas de tres plantas. Cuenta con un concepto de sostenibilidad enfocado en reducir el desperdicio de materiales.
Casas ecológicas «Method West Seattle Townhomes». Washington, Estados Unidos
20. Sky Garden House. Isla Sentosa, Singapur
Fue construida con base a materiales sostenibles y gran parte del espacio incluye jardines para que haya una armonía natural entre los espacios internos y externos. Conecta así el diseño con la naturaleza.
Casa ecológica «Sky Garden House». Isla Sentosa, Singapur
Empresas que construyen casas ecológicas en España
En España también se están desarrollando proyectos de arquitectura que tienen como eje alcanzar la sostenibilidad, ser respetuosos con el medio ambiente y conseguir crear casas ecológicas baratas en España. Todo esto sin dejar de lado la arquitectura y el diseño.
Uno de los principales promotores de ello es Ecoproyecta. Más allá de una empresa, se trata de una red colaborativa que une a profesionales de arquitectura e ingeniería con la finalidad de realizar proyectos de construcción sostenible.
Otro caso es el de Ecodome. Una empresa de arquitectura comprometida con la construcción de viviendas estéticas, con un diseño llamativo, funcionales, pero también eficientes y sostenibles.
Alojamiento Eco Dome Experience. Teguise, Lanzarote
Interior del alojamiento Eco Dome Experience. Teguise, Lanzarote
Aparte de ello, hay empresas tradicionales que no se enfocan en la construcción de hogares ecológicos, pero que han participado en proyectos del estilo. Es el caso de Iglesias Veiga Arquitectos y de Alventosa Morell.
De
cualquier forma, cada vez hay más conciencia ecológica en las sociedades y una
necesidad de respetar el ambiente con cada acción. Lo que impulsa la
construcción de casas ecológicas.
Luis
Spota (escritor mexicano) escribía como un poseído, furioso, al igual que un
boxeador que da sus mejores golpes para derribar a su contrincante.
Escribía
por horas, casi sobre cualquier tema, y digo esto porque nunca tocó el tema del
boxeo, deporte que amaba desde su niñez.
Su padre,
un italiano inmigrante, lo practicaba de forma amateur, le invitaba a boxear
para que formara su carácter, que aprendiera que “no había derrota si
persistía”.
Se hizo
un gran aficionado al box y a la lucha mexicana, veía reflejado en estos
deportes la entrega y la pasión que se necesita para seguir adelante en
cualquier contienda. En su caso fue la pasión por la escritura y la vida. Y
ninguna de las dos fue fácil.
Desde muy
joven tuvo que desempeñar diferentes trabajos que apenas le daban para comer:
vendedor de libros, repartidor de volantes, camarero en el Café Regis,
etcétera. Y la escritura, su pasión, se convirtió en su sustento de vida.
Luis Spota (Procesofoto)
Se
desarrolló con éxito en los medios impresos, que, a la vez, le acercaron al
círculo de poder político de México.
Se alejó
de la “élite intelectual” que hasta cierto punto desdeñaba. No tenía ningún
interés de ser reconocido por otros escritores como Carlos Fuentes u Octavio
Paz, que también estaban cerca del poder político.
Decía que
su “creación novelística y periodística existiría a pesar de las opiniones de
otros intelectuales”. Así es como, igual que en el deporte del boxeo, Luis
Spota aguantó los golpes de algunos intelectuales como Luis González de Alba,
Carlos Monsiváis y Elena Poniatowska, que, molestos, trataron de denigrar su
novela La Plaza, ya que incluía
algunos párrafos que ellos habían escrito y que desaparecieron en la segunda
edición.
Esa
segunda edición fue igual de polémica como la primera versión, porque contaba
los sucesos ocurridos en la Plaza de Tlatelolco en 1968, exculpando al
gobierno.
Spota
aguantó todos los golpes y nunca fue noqueado, se protegió creando su obra y realizando
un excelente trabajo como fundador y presidente del Consejo Mundial de Box, que,
por ese entonces, lo conformaban once países: Estados Unidos, Argentina,
Inglaterra, Francia, México, Filipinas, Panamá, Chile, Perú, Venezuela y
Brasil.
Sí, Luis Spota nunca fue vencido en vida, no se dejó
derrotar por las vicisitudes en ningún momento, hasta que falleció un veinte de
enero de 1985. Y, como él pronosticó: su obra sigue y seguirá vigente.