J. K. Rowling, una de las escritoras más reconocidas e influyentes del mundo, es la creadora de la famosa saga del niño mago que cautivó a millones de personas.
Desde su publicación hace 20 años, el primer título de las aventuras de Harry Potter ha vendido más de 500 millones de ejemplares en todo el mundo. Además, tuvo una extraordinaria acogida en sus adaptaciones cinematográficas.
Se calcula que la fortuna de la escocesa J. K. Rowling supera en la actualidad los 600 millones de euros. Ante este rotundo éxito, resulta difícil asimilar los días difíciles que vivió Rowling en el pasado, mientras se refugiaba en el café Elephant House de Edimburgo para escribir.
Madre soltera, desempleada y recién divorciada, no paraba de trabajar en borradores de un cuento mágico, mientras las editoriales rechazaban su proyecto una y otra vez.
Rowling ha comentado varias veces: “Era todo lo pobre que se puede ser en la Gran Bretaña de hoy antes de convertirme en una persona sin hogar”.
Según informa RTVE, en el año 2008 la autora recuperó su experiencia de fracaso en un discurso que pronunció en la Universidad de Harvard ante los recién graduados.
Ahora, estas palabras que pretenden inspirar a los jóvenes que comienzan a dar sus primeros pasos en “la vida real” han sido publicadas por la editorial Salamandra en su versión ilustrada en castellano.
En el libro Vivir bien la vida, J. K. Rowling engrana un discurso sencillo que gira en torno a dos ideas: la importancia de la imaginación y los beneficios inesperados del fracaso, un hermoso relato que engloba lecciones de vida a través de frases motivadoras.