La empresa Yego prestará a partir de marzo un novedoso servicio de motos eléctricas compartidas en Zaragoza. Inicialmente, pondrá a disposición de los usuarios 150 vehículos, con posibilidad de ampliar la flota hasta 200 unidades.
El uso se realizará mediante una aplicación móvil por un precio de 0,31 euros el minuto, con descuentos por adquirir packs de minutos. El servicio estará disponible las 24 horas en todos los distritos urbanos.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha autorizado esta actividad, que contribuye a los objetivos de movilidad sostenible de la ciudad, si bien ha limitado las tarifas aplicables. Además, la empresa deberá compartir regularmente sus datos de uso para evaluar la demanda real del servicio.
Yego aportará importantes garantías en materia de respeto al espacio público, seguridad, accesibilidad económica y enfoque social. La compañía tiene presencia en otras ocho ciudades españolas y francesas, con más de 700.000 usuarios.
“Zaragoza necesita de avances en movilidad, como vehículos autónomos o sistemas de recarga inteligente, y siempre está abierta a ampliar y mejorar los medios de transporte personal sostenible”, ha destacado la consejera municipal de Medio Ambiente y Movilidad, Tatiana Gaudes.
Cabe recordar que en 2021 el Ayuntamiento ya sacó a licitación este tipo de servicio, si bien las dos empresas seleccionadas acabaron desistiendo. Ahora Yego retoma la propuesta bajo un modelo de negocio sólido: actualmente opera en 8 ciudades mediante una flota de más de 10.000 motos eléctricas.
“Estamos encantados de apoyar a Zaragoza en su compromiso con la movilidad sostenible y valoramos la confianza depositada por el consistorio como una oportunidad para seguir demostrando nuestro saber hacer”, afirma el director general de Yego en España, Benjamin Viguier.
Entre los compromisos adquiridos destaca la lucha contra el estacionamiento indebido. Los usuarios deben enviar una foto demostrando un aparcamiento correcto al finalizar. De lo contrario, se exponen a penalizaciones e incluso la baja definitiva del servicio.
También se aplicarán importantes medidas de seguridad, como sistemas de detección de caídas y alertas ante manipulaciones. Por otro lado, la compañía se compromete a garantizar la accesibilidad económica para todos los colectivos y a mejorar la diversidad de género entre sus clientes.
Los vehículos estarán disponibles durante las 24 horas del día en todos los distritos urbanos de Zaragoza, cada uno de los cuales incluirá dos cascos y gorros higiénicos desechables.
El despliegue inicial contempla 150 motos, ampliables hasta 200 según evolucione la demanda. El uso requerirá como mínimo permiso de conducir AM, aunque también será válido el A1 o superiores. La velocidad máxima estará limitada electrónicamente a 50 km/h para garantizar la seguridad.
Además de las condiciones operativas, la empresa deberá hacer frente al pago de una tasa anual equivalente a 57 euros por vehículo. También queda obligada a compartir periódicamente indicadores sobre el servicio, como número de usuarios, tiempos medios de trayecto o incidencias.
Los expertos destacan el potencial de este tipo de soluciones de micromovilidad en entornos urbanos. Ofrecen opciones de transporte ágiles y asequibles, a la vez que reducen la contaminación atmosférica y acústica. No obstante, es clave garantizar una adecuada convivencia con el resto de medios.
El consistorio zaragozano confía en que los datos reportados por Yego le permitan calibrar la demanda real de este modelo de negocio. A partir de ahí, la experiencia piloto servirá para sentar las bases de una posible extensión futura.
