El uso del ‘stalkerware’, un software espía utilizado para controlar y monitorear a las víctimas sin su consentimiento, ha disminuido en España un 13% respecto al año anterior. Sin embargo, nuestro país se mantiene como el cuarto más afectado en Europa por este tipo de programas maliciosos que vulneran la privacidad.
El 'stalkerware' es un software espía que permite controlar y vigilar a las víctimas sin su consentimiento.
En 2023, se registraron 257 casos de usuarios de dispositivos móviles afectados por el ‘stalkerware’ en territorio español, según el informe anual de Kaspersky. A pesar de la reducción, esta cifra sitúa a España por detrás de Alemania, Francia y Reino Unido en el ranking europeo de naciones más perjudicadas.
La compañía de ciberseguridad destaca que, si bien en la mayoría de los países el uso del ‘stalkerware’ no está prohibido, su instalación en dispositivos ajenos sin consentimiento es ilegal y constitutye un delito. Estos programas, que a menudo se disfrazan de aplicaciones legítimas, proporcionan a los agresores los medios para controlar y vigilar a sus víctimas, en muchos casos sin que estas sean conscientes.
El informe revela que un 14% de los españoles encuestados admitió haber sufrido acoso ‘online’ por parte de una persona con la que habían mantenido una relación recientemente. Además, el 27% manifestó haber sido víctima de acoso o sospechaba haberlo sido. Estos datos reflejan la prevalencia de conductas abusivas perpetradas mediante el uso de la tecnología.
Asimismo, el 70% de los encuestados en España reconoció tener acceso a los dispositivos móviles de sus parejas, mientras que un 6% admitió haber instalado aplicaciones de vigilancia en los teléfonos de sus parejas o haberles presionado para que lo hicieran.
El 74% de los españoles encuestados desaprueba el control de una pareja sin su consentimiento.
Sin embargo, el 74% de los españoles desaprueba el control de una pareja sin su consentimiento, lo que demuestra un rechazo generalizado hacia este tipo de comportamientos. En cuanto a la supervisión consentida de las actividades ‘online’ de la pareja, el 69% también manifestó su desaprobación, poniendo de relieve la importancia del derecho a la intimidad.
«Estos resultados ponen de manifiesto el difícil equilibrio entre la intimidad y la protección de la información personal»,
Ha señalado David Emm, experto en seguridad y privacidad de datos de Kaspersky.