La imponente catedral de Notre Dame de París, símbolo indiscutible de la arquitectura francesa, así como de su historia, su arte y su cultura, fue construida entre los siglos XII y XIV.
Recientemente sufrió un incendio que afectó gran parte del techo y de la aguja icónica.
Mientras se evalúan los daños para una posible renovación, estudiamos a continuación 9 hechos históricos y datos curiosos importantes que se condensaron en la famosa catedral de estilo gótico, que sobrevivió a la Revolución francesa:
1. En algún momento hubo una ciudad pagana en la catedral
Lutetia era el nombre de la ciudad galorromana que se había fundado en la localidad de la catedral, mucho antes de construirse la iglesia.
La actual Île-de-la-Cité, fue una ciudad pagana y ello se evidenció en unos hallazgos que datan de 1710, cuando se encontraron piezas de un altar dedicado a Júpiter. Por tanto, la catedral de Notre Dame fue construida sobre un templo pagano.
2. Arquitectura reciclada
Entre los tres portales de la fachada occidental de la catedral, hay uno que no encaja con el resto de las imágenes sagradas esculpidas.
Se trata del Portal Sainte-Anne, con esculturas de la Virgen y el Niño, que visiblemente mostraban un estilo diferente a las demás imágenes.
Esto tiene que ver con el hecho de que esta área en específico fue tomada de una iglesia románica anterior.
3. Un bosque de árboles se usó para el techo
El apodo de “el bosque” que ha recibido el enrejado del marco de la catedral tiene un motivo bastante literal.
Se presume que para cada viga de este techo se necesitó un árbol entero, por lo que se calcula que al menos 52 acres de árboles fueron talados para ello.
4. Estatuas de reyes decapitadas y derribadas
Durante la Revolución francesa, específicamente en 1793, las estatuas de los 28 reyes bíblicos de la catedral fueron decapitadas y derribadas por la multitud enardecida.
Toda la piedra procedente de estas estatuas fue recopilada por el ministro del interior con el propósito de reutilizarla.
Pero no fue hasta 1977 cuando 21 de estas estatuas fueron halladas en el sótano del Banco Francés de Comercio Exterior.
5. Sus dos torres no son gemelas
Las dos torres de la catedral no son idénticas, pese a que pueda parecer que sí.
Un informe de medidas de las torres revela que la torre sur es más pequeña que la norte.
Esto solo confirma que la famosa catedral fue una mezcolanza de tendencias arquitectónicas y no una visión llevada por un único estilo y autor.
6. Sus campanas fueron usadas para armas de guerra
La iglesia sufrió diferentes daños y robos como consecuencia de la Revolución francesa. Uno muy notable fue la sustracción de casi todas las campanas a excepción de la campana bourdon conocida como Emmanuel.
Todas estas campanas fueron fundidas para fabricar cañones. Pese a que fueron reemplazadas más tarde, en el siglo XIX, estas campanas no tenían la misma calidad de sonido que las originales.
Ello hasta que, en 2013, se volvieron a cambiar por unas campanas similares a las primeras, que le devolvieron a la catedral la esencia de su sonido particular.
7. Napoleón y Víctor Hugo dejaron huella
Cuando Napoleón Bonaparte decidió que su coronación sería en la catedral de Notre Dame, en 1804, esta se encontraba al borde de una segura demolición por su deplorable estado.
Los trabajos de renovación previos a la coronación de Napoleón, salvaron a la iglesia de la destrucción.
Luego, el escritor y poeta Víctor Hugo catapulta la catedral como un icono de la cultura francesa, con su famosa novela Notre Dame de París, de 1831, en la cual emplea la iglesia como una personificación de Francia.
Es en esta novela en la que aparece el personaje del jorobado Quasimodo, gracias al cual la obra se conoce popularmente como El jorobado de Notre Dame.
8. Las gárgolas y quimeras no son medievales
Las gárgolas y quimeras, imágenes de monstruos mitológicos, son parte de las características más resaltantes de la catedral. Y cuando muchos creen que estas esculturas son medievales, en realidad son modernas. Estas figuras fueron agregadas entre 1843 y 1864.
9. La icónica aguja era más que un elemento decorativo
En la parte superior de la aguja se encontraba un gallo que era mucho más que un elemento ornamental.
Este gallo llegó a contener en el interior de su cuerpo de metal tres reliquias pequeñas, siendo estas una presunta pieza de la corona de espinas de Jesús de Nazareth, junto con otros fragmentos de esculturas dedicadas a Saint Genevieve y Saint Denis, los santos patronos de París.