En una ocasión ya hemos analizado una serie de productos que pueden mejorar tu viaje en avión, así hoy vamos a conocer otro curioso aspecto de los vuelos que también te puede interesar.
La comida
El objetivo de las comidas durante los vuelos cumple una doble función. Por un lado, alimenta a los pasajeros y a la vez ayuda a mantenerlos entretenidos, haciendo el viaje más ameno. Un detalle importante es que el piloto y copiloto siempre ingieren diferentes menús y el motivo es muy sencillo. Si hay un problema con los alimentos no se corre el riesgo de que ambos enfermen a la vez.
Temperatura
Algunas investigaciones señalan que el calentamiento del aire junto con la presión, pueden tener una conexión directa con la hipoxia o falta de oxígeno. Esta es la razón de que la temperatura dentro de la aeronave acostumbre a ser fresca.
Los lavabos
Todos los lavabos del avión permiten ser abiertos desde fuera por la tripulación. Habitualmente hay un mecanismo de seguridad bajo la señal de prohibido fumar para que un tripulante pueda abrir la puerta en caso de que haya algún inconveniente con un pasajero dentro.
Tripulación con una sonrisa
Al margen de las funciones que la tripulación realiza a lo largo de un vuelo, al igual que sucede con alguno de los más populares juegos de casino, han de saber representar a la perfección esa cara de póker con su eterna sonrisa que tiene como objetivo tranquilizar al pasaje en cualquier circunstancia. Nadie desea un pasajero histérico en una aeronave, así que un sentido del humor adecuado y una actitud agradable, pueden ser la mejor medicina para evitarlo.
Puertas blindadas
Los pilotos viajan separados del resto de la tripulación por puertas blindadas y se comunican a través del interfono. Por este motivo deben hacerlo cada 40 minutos durante los vuelos de día y cada 20 minutos por la noche, advirtiendo así que todo está bien. En cualquier caso, los sobrecargos poseen un código de emergencia para acceder a la cabina.
Pasajeros a los mandos
Al hilo de lo anterior, hay que tener en cuenta que, si los pilotos sufrieran algún contratiempo, sería imposible que un pasajero pudiera manejar la nave por su complejidad, a no ser que fuera por casualidad otro comandante de aeronave. El resto de situaciones solo suceden en el cine. Bien es cierto que el piloto automático toma el mando del avión en gran parte del vuelo, ya que puede realizar ajustes más precisos, aunque no lo hace normalmente durante el aterrizaje o despegue ni con turbulencias importantes.
Los mejores asientos
Si antes de viajar tienes la oportunidad de elegir tu asiento es importante saber que los más tranquilos están en la zona de las alas. Eso sí, los más cotizados son los que están en las salidas de emergencias porque permiten estirar mejor las piernas, pero no dispones de ese espacio para colocar el equipaje bajo en asiento anterior. Aunque si eres una de esas personas que sube al avión pensando en que puede sufrir un accidente, las estadísticas dicen que la parte de la cola es la más segura.
Máscaras de oxígeno
En caso de accidente u otro contratiempo durante el vuelo, las máscaras de oxígeno destinadas a los pasajeros tienen autonomía para 15 minutos. Se estima que en ese tiempo el comandante del avión tiene margen de maniobra más que suficiente para descender la nave por debajo de una altitud en la que se puede respirar sin dificultad.
Iluminación
Durante el despegue y aterrizaje se reduce la iluminación interior de la aeronave para que la vista del pasaje se adapte a la oscuridad y en caso de una incidencia grave puedan vislumbrar con facilidad las señales que indican las salidas de emergencia. No hay que olvidar que el 80% de los accidentes tienen lugar en los 3 minutos siguientes al despegue y tras los 8 minutos previos al aterrizaje.
Calzado
Es habitual ponernos una ropa cómoda durante los vuelos de larga duración, aunque una de las consignas más importantes es utilizar un calzado cómodo y con una buena suela, es decir, evitar las chanclas y similares. La inflamación que la altitud provoca en nuestros pies requiere de comodidad, pero sin olvidar que en caso de evacuación un calzado adecuado puede facilitar las cosas.
En cualquier caso, no es necesario obsesionarse en exceso, hoy en día el avión es el medio de transporte más seguro del planeta.