Es de humanos relacionarse entre sí, o, mejor dicho, de todos los seres vivos. Estamos dentro de un sistema, que a la vez está dentro de otros (teoría de los sistemas). Por tanto, ningún elemento queda aislado del otro, ¿sabías eso? pero, quizás de lo que no tenías idea es que dentro de nuestra mente una de las cosas que realmente influye al relacionarse con los demás es la personalidad. Sí, la manera de ser de cada quien, su conjunto de características únicas que diferencian a un individuo del otro en cuanto a su psiquis concierne.
La personalidad juega un papel sumamente importante en la psique. Los expertos consideran que muchas personas tienden a tener dificultad para relacionarse, o bien no se sienten cómodas entablando nuevas relaciones (amistades, noviazgos, etc.). Todo esto debido a un rasgo en concreto de la personalidad: ¡la introversión!
Son muchos los autores que incluyen a la introversión dentro de su análisis de los tipos de personalidad. Se podría decir que casi un 100% de estos lo incluyen; por ende, dependiendo de qué tipo de personalidad poseas, puede que tengas más o menos ciertos grados de dicha característica. No todos poseemos el mismo nivel de ello, ni de lo que podría decir que es su rasgo contrario; la extroversión.
Quienes posean más introversión serán personas más cerradas, enfrascadas en círculos sociales pequeños y con dificultad para conocer a nuevas personas. De hecho, según nuevos estudios, han determinado que tratar de entablar una conversación representa un “esfuerzo enorme” para el cerebro de alguien penoso/a. Por lo tanto, el propio cerebro no lo tiene dentro de sus prioridades. Más bien utiliza ese esfuerzo en otras cualidades como la creatividad, el análisis, etc.
El cerebro de las personas introvertidas y extrovertidas actúa diferente al socializar con otros
En este sentido, si sientes que eres algo introvertido no se recomienda tratar de socializar de un día para el otro. Lo mejor es tomarse su tiempo e ir teniendo sesiones de salidas, y otros días pásala a solas. ¿Quieres saber a ciencia cierta qué tipo de personalidad tienes? ¿Cuál sería tu rasgo más característico? para ello puedes valerte de un test de análisis online de tu personalidad. Solo bastará con responder un par de preguntas, y en cuestión de segundos obtendrás los resultados.
Por otro lado, los estados de ánimos son factores que también influyen en nuestra forma de socializar. Una persona desmotivada, o desganada tendrá menos posibilidades de entablar una buena conversación con alguien más. En este sentido, puedes accionar teniendo ayuda de un psicólogo, o charlando con personas de confianza que puedan animarte.
Muchas veces cuando se está desmotivado/a, se tiende a pensar que conversar con alguien más no aportará absolutamente nada positivo. Sin embargo, para superar estos estados de ánimo lo mejor que puedes hacer es comunicarte con alguien más. No puede ser cualquier persona; sino que como mencionamos, debe ser alguien de confianza y que tenga empatía.
Finalmente, existen otros motivos por los que tu personalidad y psiquis pueden estar afectadas, y por ende tengas dificultad a la hora de relacionarte con los demás. Como ejemplo, en casos de depresión, asperger o trastornos de ansiedad. En todo caso, los expertos pueden aportar ayuda a cualquiera de estas situaciones, incluso a través de plataformas online (terapia a distancia).
Y ahora que ya sabes sobre las diferencias en la personalidad a la hora de socializar, ¿Por qué no intentas hacerlo? aunque parezca imposible en ciertos momentos, la realidad es que poco a poco puedes ir saliendo de ese estado de introversión o depresión. Es cuestión de enfocarse, seleccionar un buen entorno de amigos y ser constante.
El síndrome de Asperger no es una patología, es una condición neurobiologica.