La mayoría de equipos incluyen un sistema operativo pre-instalado de serie. Lo más frecuente es que tengan el sistema Microsoft Windows, aunque también están los macOS para los dispositivos de Apple, o ChromeOS para los Chromebooks. También existen algunas excepciones, con distribuciones GNU/Linux, etc.
Sin embargo, existe una alternativa que cada vez cuenta con más adeptos dadas sus ventajas: el portátil sin sistema operativo.
Ventajas y desventajas de un portátil sin sistema operativo
Existen multitud de marcas y modelos de portátil sin sistema operativo. Cada vez son más numerosos y se venden con mayor frecuencia. Los motivos para que hayan crecido sus ventas últimamente tienen que ver con las ventajas que aportan al usuario final:
- Suelen ser portátiles más baratos, incluso si la licencia del sistema operativo es gratis, puesto que se paga la instalación del sistema.
- Sin molestias para aquellos que desean instalar un sistema operativo diferente al que suele venir de serie. Ya sea un sistema libre, uno propietario del que se tenga una licencia, o se haya adquirido una de segunda mano barata, etc.
- Carecen de formato o particiones (incluidas las ocultas de recuperación que suelen incluir algunos), para que se pueda crear el espacio de particionamiento deseado y elegir el sistema de ficheros o formato.
No todo son ventajas en un portátil sin sistema operativo. También existen algunas desventajas que se deben conocer antes de comprar uno de estos equipos:
- No son una buena elección para usuarios sin conocimientos técnicos, ya que carecerán de los conocimientos necesarios para el particionamiento, formateo e instalación del SO.
- Menos cómodo, ya que se debe instalar y configurar todo desde cero, mientras los equipos con sistema operativo se pueden empezar a usar desde el momento en el que se desempaquetan.
¿Se puede instalar cualquier sistema operativo en ellos?
En principio, en este tipo de portátil sin sistema operativo se puede instalar cualquier sistema operativo compatible con la arquitectura del equipo. Es decir, ARM o x86 fundamentalmente. Esto incluye sistemas como Microsoft Windows, Solaris, GNU/Linux, FreeBSD, ChromiumOS, Android, etc.
El problema viene cuando se desea instalar sistemas con algunas necesidades específicas. Por ejemplo, antes mediante hackintosh se podía usar macOS, ahora está más restringido. También es importante destacar el caso de Microsoft Windows 11, que necesita que el equipo tenga TPM versión 2.0, como ocurrió en su momento con Windows 8.x y el firmware UEFI con Secure Boot.
Las nuevas generaciones de portátiles suelen incluir TPM 2.0, pero se debe estar seguro, de lo contrario habría problemas para instalar la nueva versión del sistema Windows o para actualizar desde una versión anterior.
En el resto de los casos, no habría problema alguno, siempre que el equipo portátil cumpla con los requisitos mínimos recomendados para los principales sistemas operativos:
- Microsoft Windows 10:
- Procesador: de 64-bit y 1 Ghz de frecuencia de reloj o superior.
- Memoria RAM: 1 GB para la edición de 32-bit y 2 GB para la edición de 64-bit.
- Disco duro: SSD o HDD con al menos 16 GB libres para la de 32-bit y 20 GB para la de 64-bit.
- GPU: compatible con la API gráfica DirectX 9 o superior y con el driver WDDM 1.0.
- Pantalla: de al menos 800×600 px de resolución.
- UEFI + Secure Boot.
- Conexión a Internet recomendable para la activación y actualización.
- Microsoft Windows 11 (se puede usar la app de comprobación para la compatibilidad de Microsoft):
- Procesador: de 64-bit y 1Ghz de frecuencia de reloj y 2 núcleos o superior.
- Memoria RAM: al menos 4 GB.
- Almacenamiento: disco duro SSD o HDD con capacidad de 64 GB.
- GPU: compatible con la API gráfica DirectX 12 o superior, y compatible con el driver WDDM 2.0.
- Pantalla: de 9 pulgadas o mayor, con 8-bits de profundad de colro y resolución mínima HD.
- UEFI + Secure Boot + TPM 2.0.
- Conexión a Internet (recomendable) para la actualización.
- Ubuntu 21.10 (versión con escritorio):
- Procesador: 2 Ghz de frecuencia.
- Memoria RAM: 4 GB.
- Disco duro: SSD o HDD con 25 GB libres (8.6 GB como mínimo). También es posible instalar en un LiveDVD o en una memoria USB.
- GPU: capaz de soportar una resolución de 1024×768 px y API OpenGL.
- La conexión a Internet es recomendable para la actualización del sistema de paquetes.
Por último, no se puede instalar un sistema operativo Windows con licencia OEM de otro fabricante en un portátil sin sistema operativo diferente. Por ejemplo, usar la licencia y clave de un Windows 10 de un Acer para un ASUS o viceversa (igual para el resto de marcas), ya que estas licencias guardadas en el firmware detectan que hubo un cambio de equipo y no se activarán.
