Cultura

La noche estrellada: historia, características, significado y curiosidades de la pintura de Van Gogh

Once estrellas de óleo iluminaron el alma de Vincent Van Gogh en uno de sus momentos más turbios. Pocos pueden imaginar como el “genio incomprendido” logró concebir en medio de su naufragio mental una de las pinturas referenciales de mayor influencia en el planeta. Su obra maestra, La noche estrellada o Una noche estrellada, fue su luz en medio de una vida de locura y oscuras pinceladas.

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Breve historia de La noche estrellada

Afectado mental y moralmente para el momento en que realizó su obra más famosa, La noche estrellada, Vincent Van Gogh la consideraba una de sus tantos fracasos pues en vida apenas logró vender una de sus tantas creaciones. No imaginaba que cien años más tarde representaría uno de los símbolos más importante del neoimpresionismo.

El atormentado artista holandés pintó ese cuadro en una época difícil en la que se intoxicaba deliberadamente con pintura y sufría ataques epilépticos, alucinaciones y depresiones. Tras los barrotes del centro de salud donde se encontraba recluido plasmó en un hermoso cielo azul, su deplorable estado físico y anímico.

Mirada técnica de La noche estrellada

La pintura de La noche estrellada nació entonces en un manicomio en el año de 1888 y  fue elaborada sobre un lienzo de 73,7 X 92,1 centímetros; con pinceladas gruesas y ondulantes de óleo; y en el que prevalecen los colores blancos, amarillos, verdes y azules. Los tonos claros y brillantes del cielo en espirales, contrastan con los matices oscuros del poblado como parte de las características de La noche estrellada.

El autor de La noche estrellada dio especial atención a la luminiscencia, bastante evidente en el cielo, en el que destacan los azules y dorados marcados por gruesos brochazos y remolinos que forman estrellas y una enorme luna.

Dentro del cuadro de La noche estrellada se contemplan dos franjas horizontales que dividen el  cielo y un paisaje. En el área superior se observan 11 estrellas, distribuidas en unas líneas ondulantes que generan la sensación de movimiento y que dirigen hacia una luna ubicada en la esquina superior derecha. En la parte baja de la pintura del cielo estrellado se aprecia un poblado descrito de montañas y casas. Un árbol ciprés con su protagonismo rompe la horizontalidad de la composición.

Características de La noche estrellada

Existen muchas teorías sobre el significado de esta obra y de lo que el artista quiso manifestar a través del cuadro, el significado de La noche estrellada. La forma más implícita indica que conforme a su estilo emocional, el paisaje es la imagen de lo que el artista observaba a través de su ventana desde el centro de salud mental. La pintura de noche estrellada que pertenece al género del paisaje, muestra principalmente al pueblo de Saint-Remy bajo un cielo nocturno esclarecido.

El elemento más onírico de la composición es el cielo de remolinos, el que los críticos asemejan a la violencia y perturbación de sus emociones, mientras la villa que no se encontraba al alcance de su mirada fue producto de su imaginación. La omisión de las rejas de la ventana en la pintura original de La noche estrellada de Van Gogh revela su deseo de libertad y la idealización del escueto panorama. La paleta de colores utilizada en tonos oscuros se le asigna a su estado depresivo.

Algunas apreciaciones más dramáticas hablan de que La noche estrellada como obra de arte refleja la pequeñez del ser humano frente a las fuerzas de la naturaleza y cada uno de sus elementos.

De lo que no cabe duda, es que los astros fueron unas de las principales inspiraciones para el artista durante sus años de tormenta. En sus innumerables escritos y cartas, quién pintó La noche estrellada citaba a las estrellas en frases para destacar la importancia que él les daba y que representaba físicamente a través de sus pinturas.

“No sé nada con certeza pero ver las estrellas me hace soñar”; «Sueño con pintar y luego pinto mis sueños»; “La esperanza está en las estrellas”, son algunas de sus notas más célebres, la mayoría dirigidas a su hermano menor Theo y relacionadas a los pensamientos que plasmaba sobre el lienzo.

Primera pintura del cielo estrellado

Así lo hizo meses antes en su obra titulada La noche estrellada sobre el Ródano, durante el mismo año 1888 cuando residía en la municipalidad francesa de Arlés, que expresa la escena serena de un cielo cubierto de estrellas y como protagonistas en primer plano, la silueta de dos amantes.

Noche de estrellas sobre el Río Ródano (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

Con muchas de las mismas cualidades del estilo de La noche estrellada, esta pintura de las estrellas reflejándose en el río Rhone, posee características como que las estrellas del cielo están rodeadas por su propio globo de luz, la reflexión de luz artificial obliga un recorrido visual casi obligatorio y la presencia de seres humanos da un aspecto de calidez y realismo.

Y aunque ambas obras conservan un elemento esencial en común, las diferencia el lugar  y las circunstancias en las que fueron realizadas. La noche estrellada sobre el Ródano fue concebida cerca de su cómoda casa francesa mientras que la obra de La noche estrellada detrás de los barrotes de hierro de un sanatorio, desde el cual según lo aseguraba el artista veía salir el sol todas las mañanas.

Varios dibujos de La noche estrellada

Vincent Van Gogh desde el hospital psiquiátrico observaba cada atardecer el ocaso del sol, lo que se cree le indujo la iniciativa para pintar una Noche Estrellada. El paisaje bajo su foco fue pintado en diferentes ocasiones y en distintas horas del día, y le era prohibido pintar en su habitación por lo que se presume la obra fue conclusión de estos bocetos y de su afectada memoria.

Aunque el dibujo de La noche estrellada de Van Gogh, le costó un total de 21 intentos en diferentes climas y horarios, el pintor tuvo predilección por el ambiente estrellado que destaca el afamado cuadro.

Diez años de intensa vida artística

Vincent Van Gogh quien nació en 1853 en Zundert, Holanda; falleció cuando tenía tan solo 37 años. Tuvo una corta pero intensa vida, que se recuerda más que por su difícil relación con el mundo, por sus conmovedoras y geniales pinturas.

Inició su carrera artística a la edad de 27 años, un poco más tarde que el común de sus colegas en esa época, cansado de sus intentos como vendedor de arte y misionero en una comunidad minera.

Sus intentos fallidos en el comercio y sus fracasos en las relaciones románticas, lo llevaron a su intensión de convertirse en pastor evangelista como su padre, para lo que recibió formación en Bruselas y trabajó como predicador laico en Borinage, Bélgica.

Pero para fortuna de la humanidad,  en el año 1880 regresó a casa de sus padres convencido de que su futuro no era ni la religión ni el comercio, sino el arte y comenzó sin ninguna formación formal su decidida travesía de pintar su entorno, por ejemplo, gente en actividades cotidianas y en un estilo crudo, bajo influencia de artistas como Millet. Los Comedores de patatas, realizada en 1885 es una representación de su propósito artístico durante esa época.

Comedores de Patatas, de Van Gogh (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

Camino hacia el cielo estrellado de Van Gogh

Años después Van Gogh deja la casa materna y se va a vivir con su hermano Theo en París, donde descubrió las obras neoimpresionistas que se gestaban así como a otros jóvenes que desarrollaban grandes ideas, por lo que empieza a adoptar nuevas técnicas y colores más claros.

En febrero de 1887 se trasladó al sur de Francia, buscando luz literalmente para sus obras y arrancó así una aventura creativa de autorretratos, paisajes y flores, es entonces cuando agrega las pinceladas ondulantes y la intensa gama de azules, verdes y amarillos. Su obra Los Girasoles refleja parte de su inspiración realista con influencia del género neerlandes y asemejando algunos grabados japoneses.

Una de las repeticiones de la serie Girasoles de Van Gogh. Esta pertenece al año 1888 (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

La oreja de Van Gogh

En ese período Van Gogh planeaba formar un taller colectivo con sus amigos, pero surgieron algunos desacuerdos con uno de ellos, Paul Gauguin; con el que sostenía violentas discusiones y a quien relacionan con la laceración de su oreja.  

Se cree que producto de su enfermedad mental, en una de sus crisis psicóticas, Van Gogh intentó agredir con una navaja de afeitar a Gauguin y entonces se autolesionó ese 23 de diciembre de 1888. Se atañó la culpa a la falta de sueño, la pésima alimentación y el abuso de alcohol por lo que decidió acudir voluntariamente al hospital psiquiátrico Saint-Paul-de-Mausole, en Saint Remy días después.

Autorretrato de Van Gogh donde se percibe la lesión en su oreja. (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

Creador imparable

Frente a sus frecuentes alucinaciones y delirios, el joven artista fue internado en el manicomio algunos días después del incidente y pese a eso, en ningún momento dejó de trabajar, eso sí, sus pintura eran el espejo de su estresante experiencia en ese momento. Abundan en sus pinturas los arboles cipreses, olivos y los campos de trigos que bordeaban el lugar, así como las tonalidades sombrías, las pinceladas nerviosas y las formas lúgubres. En ese encierro germinó La noche estrellada de Vincent Van Gogh a finales de ese agitado año.

Van Gogh reunió diez años de intensa creación, regaló a la humanidad un periodo de ardua producción de sus obras. Se estima que son más de 900 pinturas, además de pasados los 1600 dibujos y bocetos. No conforme escribió casi el mismo número de cartas y tarjetas postales.

Desafortunadamente en vida, el artista solo vendió una obra y apenas con 37 años de edad perdió la vida.

Dado de alta e instalado en Auvers-sur-Oise, agobiado por la soledad, los pensamientos y la melancolía, Van Gogh se da  un disparo en el pecho el 27 de julio de 1890. Murió dos días después y dos años después de inventar una noche estrellada.

Noches de cobalto de Van Gogh

Las imágenes del cielo nocturno también aparecen en otras de sus pinturas, como en La terraza de café por la noche, La iglesia de Aurves y La noche estrellada sobre el Rodano.

Terraza de café por la noche (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

La iglesia de Aurves se exhibe en el Museo de Orsay, mide 74 centímetros por 94, es una pintura al oleo realizada por Vincent en 1890 tras dejar el psiquiátrico. Forma parte de los 70 cuadros que pintó en las afueras de París donde pasó sus últimas semanas de existencia.

Muestra la representación de una iglesia gótica rural bajo un profundo cielo azulado, ubicada a lo alto de una colina hacia donde se dirige una campesina. Una obra realista donde la iglesia parece estar derrumbándose, como su vida para ese entonces.

La iglesia de Auvers-Sur-Oise (Vincent van Gogh, Public domain, via Wikimedia Commons / Recorte, mejora de tono y resolución de la original).

La terraza de café por la noche, forma parte de una serie de pinturas realizadas en 1888 y muestra el cielo cubierto de estrella desde otra perspectiva. La pintura muestra un café en la ciudad de Arles, con colores cálidos y es la primera obra en la que Van Gogh utilizó un fondo estrellado. 

Esta obra, junto a La noche Estrellada y la Noche estrellada sobre el Ródano, tienen en común el escenario de un fondo nocturno iluminado y un cielo activo en continuo movimiento. Esta técnica así como el significado que le agrega a estas cuatro obras, ha impactado a millones de personas durante décadas que se acercan hasta los museos en ciudades dispersas para admirarlas e interpretarlas.

Interpretaciones de la noche de estrellas de Van Gogh

El primer analista de esta, una de sus obras más alegóricas fue el mismo artista. La pintura de Van Gogh La noche estrellada que trata de una mirada a lo que el pintor vivió durante su reclusión en el manicomio y la cual fue reproducida 21 veces, fue evaluada por su creador en una carta que dirigió a su hermano, en la que describía el trigo y el sol que aparecía en su corta vista pero amplia visión.

Como son pocos los detalles que se tienen de esa autoevaluación, existen miles de opiniones y percepciones sobre el significado de La noche estrellada y lo que el artista quiso expresar  a través de sus trazos y sus tonos.

Emoción y dolor

La opinión más común señala que el lienzo es una expresión de su emotividad y que a través de él quiso reflejar el dolor y la confusión que sentía en esa época en la que lo agobiaban además de su enfermedad, sus fracasos. También su necesidad de encontrar la luz en ese exterior que anhelaba mejor.

Los críticos señalan que a través de la pintura noche estrellada de Van Gogh, se puede conocer al artista y de la manera positiva en la que exteriorizó su dolor para el bien de la historia del arte. Con una visión sin simbolismos y atormentada compartió al mundo su percepción de la belleza y la tragedia en convivencia.

Así la noche de Van Gogh es una mezcla de belleza y violencia, con detalles distantes de la realidad y colores sin lógica que lo destacan del resto de los artistas de esa Era.

Deseo de libertad

La muestra surrealista de una noche oscura iluminada, una noche estrellada ha sido interpretada por muchos expertos como el símbolo de un profundo deseo de escape, pero no del lugar donde se encontraba, sino un escape de su alma atormentada.

El historiador Sven Loevgren lo manifiesta como una visión apocalíptica en que esta deja el cuerpo y se integra con el cosmos, en conclusión, Van Gogh y La noche estrellada un grito desesperado en búsqueda de la calma y la esperanza. 

La muerte

Otra simbología frecuente que se le asigna a una noche estrellada, es la de su relación con la muerte. Algunas teorías afirman que los árboles del cuadro son cipreses, asociados a los cementerios y a la muerte.

Esta aseveración la confirma Van Gogh en una de sus cartas: “Mirar a las estrellas siempre me deja soñar. ¿Por qué, me pregunto, no deberían los puntos brillantes del cielo ser tan accesibles como los puntos negros del mapa de Francia? Así como tomamos el tren para llegar a Tarascon o Rouen, tomamos la muerte para llegar a una estrella”.

Pasado religioso

Los elementos de una noche estrellada han generado diversidad de críticas e interpretaciones, al punto de que algunos relacionan las estrellas con su pasado religioso, pero esta percepción es guiada más por sus escritos y su biografía que por la composición pictórica. 

“Cuando siento una necesidad de religión, salgo de noche y pinto las estrellas”, no deja duda de esta aseveración. En ese punto de su historia, Van Gogh había perdido la fe en Dios, y sus esfuerzos por ser uno de sus más fieles seguidores, como lo fue su padre conocido como un gran predicador.

Homenajes a la obra: inspiración por siglos

Lo cierto es que son muchos los rasgos fundamentales de este cuadro que intriga a las personas que lo observan y cada detalle afecta en modo distinto a cada individuo, a miles desde su espacio reservado en el MoMa (Museo de Artes Moderno). El precio de La noche estrellada, es valuado entre los 500 y mil millones de dólares.

Es por ello que esta obra postmodernista ha inspirado a muchos artistas en el planeta, desde músicos, escritores y cineastas, arquitectos, ingenieros, etc. Por ejemplo, la canción Vincent de Don McLean, fue dedicada en 1971 al artista plástico y a su perspectiva del mundo.

Loving Vincent, una película de animación en la que cada fotograma ha sido pintado a mano también fue dedicada al pintor, contiene 65 mil fotogramas realizados por 125 pintores a lo largo de 6 años.

La noche estrellada es una de las imágenes más reconocida y replicada en la cultura moderna, con diferentes materiales y sobre diferentes plataformas. Portadas de discos, películas, murales de edificios, piscinas y uno de los más curiosos, resulta un juego desarrollado por el joven Truman Cheng para su proyecto de diseño a un sitio web de ideas en Lego, consta de 1552 piezas que pinta con bloques el paisaje.  

Más recientemente, entre marzo y diciembre de 2019, el museo parisino Atelier des Lumieres presentó la exposición Van Gogh, La noche estrellada, en una experiencia única que le permitía al público caminar dentro de las diversas obras.


Esta muestra orientada a la noche estrellada de Van Gogh, hacía un recorrido por la intensa vida del artista y de algunas de sus pinturas, desde Potato Eaters, Sunflowers, Starry Night y The Bedroom.  El recorrido involucró también un paseo por los lugares que marcaron sus etapas creativas, como en el caso de Neunen, París, Arles, Saint Remy de Provence y Auvers-sur-Oise.

El director artístico de la exposición, Gianfranco Lannuzzi, a fin de generar una experiencia sensorial y estética inédita, utilizó un total de 140 proyectores de vídeo láser de última tecnología, con imágenes de La noche estrellada de Van Gogh y otras pinturas en alta definición y un sonido envolvente estimulado por 50 bocinas. Todo este aparataje, permitió al público caminar por sobre y alrededor de miles de fotos de La noche estrellada que creaban un ambiente inigualable.

La Noche Estrellada o Una noche estrellada es probablemente una de las obras pictóricas más famosas de la historia y de la locura, y pese a este último defecto hoy trasciende a más de 130 años. Bien lo dijo Van Gogh quien, a pesar de su corta y perturbada trayectoria por el mundo, a través de ella sigue vivo: «Desde luego que para el arte, donde se tiene necesidad de tiempo, no estaría mal vivir más de una vida».

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