Variedades

Descubre los tipos de té más conocidos y sus principales propiedades

Tomar té es una práctica sumamente extendida en diferentes culturas y que, en los últimos años, ha conquistado muchos más espacios alrededor del mundo. Esto se debe, principalmente, a todos los beneficios que otorgan estas bebidas a nuestro bienestar general, además de la variedad de exquisitos sabores. Además, hoy en día es posible comprar tés online de la más alta calidad y recibirlos en casa, por lo que se trata de una opción perfecta, deliciosa y saludable para disfrutar solo o en compañía de nuestra familia y amigos. 

Principales tipos de té

Diversos estudios, realizados en los últimos años, han demostrado que el consumo moderado de té puede proporcionar interesantes beneficios para nuestra salud general, y dependiendo del tipo de té, estos beneficios pueden ser más específicos para una área determinada. 

En este sentido, es importante destacar que en el mercado actual hay una gran variedad de tés, los cuales tienen propiedades, colores y sabores completamente diferentes. Conocerlos es importante, no solo para descubrir los de nuestra preferencia y gusto, sino también para hacer compras variadas y combinarlos en función de nuestras necesidades y requerimientos en todo momento.

Por supuesto, la clave para aprovechar al máximo este tipo de bebida cien por cien natural, es siempre adquirirla en tiendas que garanticen la calidad de las mismas. 

A continuación compartimos cuáles son algunos de los principales tipos de té más conocidos y comprados de la actualidad.

  • Té verde

Sin lugar a dudas, el té verde se ha posicionado como uno de los más conocidos y vendidos en la actualidad, y esto se debe, principalmente, a todas las propiedades y efectos que genera en el organismo a corto, medio y largo plazo. Para muchas personas, más allá de su sabor, se trata de una elección a tomar por su salud y bienestar.

El té verde es rico en antioxidantes, por lo que es un excelente aliado para reducir las probabilidades de desarrollar ciertos tipos de enfermedades o afecciones, como es el caso de la diabetes, el Alzheimer y mejorar el aspecto de la piel. Además, es un magnífico aliado para la pérdida de peso.

  • Té negro

Otra de las variedades de té más conocidas es el negro. Tiene un aroma y sabor mucho más intenso, y al igual que ocurre con el té verde, también tiene interesantes propiedades. De ahí que su consumo moderado y habitual se asocie como un aliado poderoso para cuidar la salud cardiovascular.

Adicionalmente, se ha demostrado que el té negro es un magnífico aliado para regular el azúcar en la sangre y también es un potente estimulante, por lo que es ideal para activarnos por las mañanas. Pero sin los efectos secundarios de la cafeína, que suele ponernos nerviosos. 

  • Té rojo

Este té también es muy conocido por sus propiedades antiinflamatorias, y también, por ser un excelente aliado para todas aquellas personas que desean perder peso. Se trata de una opción depurativa que, adicionalmente, proporciona muchos otros beneficios.

Al igual que el té verde y el té negro, el té rojo también tiene propiedades antioxidantes, por lo que tiene la capacidad de estimular la regeneración de las células. Este té, además, también es un buen estimulante para las funciones cognitivas, por lo que es una buena opción para mejorar el rendimiento, aunque es importante destacar que no es tan potente como el té verde y el negro. 

  • Té blanco

El té blanco también tiene propiedades sumamente interesantes, especialmente en lo que respecta a la salud cardiovascular. De ahí que se trate de una excelente opción para quienes tienen problemas del corazón.

Por otro lado, las propiedades y beneficios de este té, no solo se notan a nivel interno, sino también a nivel externo, porque mejora de forma considerable el aspecto de la piel. Adicionalmente, también se ha demostrado que es sumamente efectivo para combatir la fatiga, reducir las probabilidades de sufrir infecciones, reducir la ansiedad, el estrés y mejorar el tránsito intestinal, entre muchos otros beneficios.

  • Té azul

Este té no es uno de los más famosos en Occidente, sin embargo, también tiene una gran cantidad de propiedades, que lo posicionan como una excelente alternativa para cuidar de nuestra salud.

En este caso, también tiene propiedades antioxidantes que ayudan a la regeneración de las células, lo que reduce la aparición de diferentes tipos de cáncer, además de cuidar la salud cardiovascular. También, el té azul es sumamente digestivo, por lo que también se trata de una buena opción para tomar después de una comida muy fuerte. 

¿Cuándo es el mejor momento para tomar té?

Si bien los tés anteriores son algunos de los más conocidos, hay muchas otras variedades, entre los cuales, destacan el té matcha, amarillo y chai, entre muchos otros tipos de tés clásicos. Lo importante es saber que la gran mayoría tienen propiedades antioxidantes, en mayor o menor medida, que de forma directa e indirecta contribuyen con nuestro bienestar general. Sin embargo, también debemos destacar que el momento de tomarlos también puede potenciar, aún más, sus efectos.

Como comentamos anteriormente, el té negro, por ejemplo, es ideal consumirlo a primera hora de la mañana, junto o después del desayuno, para activar todas las funciones cognitivas; mientras que el té azul es preferible consumirlo después de comidas muy fuertes, con el objetivo de aprovechar al máximo sus propiedades digestivas.

A media mañana o a media tarde, también son momentos ideales para consumir cualquiera de los tés anteriores, porque en general, se trata de opciones sumamente ligeras que solo van a aportar beneficios al organismo. Sin embargo, es importante que, ante la existencia de cualquier patología o condición, consultemos primero con nuestro médico, para asegurarnos de que es una opción perfectamente segura de consumir. En este sentido, Mi Revista amplía un poco más la información sobre cuál o cuáles son los tés más convenientes en función de cada ocasión y los objetivos. 

En general, la gran mayoría de tés proporcionan muchos beneficios para la salud. La clave radica en comprar tés de buena calidad, consumirlos de forma habitual, y al mismo tiempo, de forma moderada. Además, elegir el mejor momento del día puede ayudarnos a aprovechar, aún más, todas sus magníficas propiedades. 

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